Las crossover son lo que el mundo parece querer, lo que es muy conveniente para la combinación FIAT-Chrysler y su catálogo de plataformas modulares de motor transversal. Por eso, esta Jeep Cherokee completamente nueva, ya no está cortada de forma cuadrada, ni tampoco es una 4×4 tradicional con un cofre largo que cubre un motor longitudinal con una caja de cambios atrás.
En vez de eso, este quinto auto en portar el nombre de los nativos americanos, es una mezcla inquietante de características de estilizado de Jeep (parrilla de siete elementos verticales, arcos de las ruedas angulares), detalles de diseño de moda (sin líneas rectas, superficies cóncavas, luces traseras trapezoidales dispuestas en ángulo), el cofre corto y el largo volado frontal que traicionan la colocación de su planta de poder.
Hecha con más convicción, podría parecer la propuesta de un estudiante de diseño para una Jeep futurista, con el angulado del parabrisas, la notable cresta en la parrilla frontal de dos planos y las luces de día delanteras en el lugar en que uno esperaría los faros. Pero ese estudiante de diseño habría endurecido más su aspecto. Y eso es precisamente lo que Jeep ha hecho para la versión principal de la Trailhawk de edición limitada, pese a ser el atractivo visual del elenco. ¿Por qué limitada? Porque así como tiene el surtido completo de características todo terreno que se le negó a las Cherokees menores, los revestimientos más fornidos, los detalles en gris y los faldones recortados, tiene un motor V6 de 3.2 litros sediento de gasolina, con 268 caballos que nadie querrá comprar.
Así que las Cherokees del mundo real vienen con un turbodiésel Multijet Ii de Fiat, con 138 o 168 caballos y 2.0 litros, emparejado el primero a una caja manual de seis velocidades, y el segundo a una automática ZF de nueve velocidades. Puedes tener tracción delantera (en las versiones de más baja potencia) o tracción total, esta última conecta y desconecta automáticamente la tracción en las ruedas traseras para mejorar la economía, según se requiera. Los niveles en las vestiduras con el Longitude o el más acojinado Limited, y ambas aspiran al lujo que las haría rivalizar con la Audi Q5 o la BMW X3 a un precio menor.
Ciertamente, la cabina es un trabajo de mucha más calidad que el de las Cherokees pasadas, con superficies acojinadas, sin ruidos ni crujidos, casi sin ruido de viento y una navegación satelital decente. Te sientas en una posición de manejo auténticamente en comando configurada por un asiento eléctrico multiajustable, pero el ángulo del volante está sorprendentemente lejos de la vertical. Los insertos de madera falsa en las puertas desentonan un poco, la guanteras es pequeña y esas superficies acojinadas son un poco toscas y brillosas como para preocupar a los alemanes.
En el manejo, la Cherokee se siente como la crossover alta, pero tersa que es. La dirección (del Alfa Romeo Giulietta) es mucho más precisa que la de Cherokees anteriores, y el paseo es suave en su mayor parte, excepto por alguna vibración sobre ondulaciones. En la variante AWD de 168 caballos, el motor se suaviza a velocidad y tiene un empuje adecuado en el rebase, mientras que la caja de nueve velocidades cambia con tersura y sin obstrucciones. No tiene mariposas, pero si quieres explorar esos cambios puedes accionar la palanca hacia atrás para subir y hacia adelante para bajar marchas.
Esta es una SUV práctica y espaciosa, aunque no muy aspiracional para conducir, pero su aura está lejos de la de las Cherokees previas. El remedio radica en incluir una Trailhawk de diésel, y su ausencia es una omisión para la planeación mundial de producto de Jeep. Algo en esa línea podría llegar el año próximo, pero para entonces el caballo ya podría haber partido.
Las opciones 4×4 de Jeep
El sistema estándar 4×4 en la Cherokee es llamado Active Drive I, que conecta tracción a las ruedas traseras sólo cuando se requiera, ya sea para proveer tracción o para ayudar a corregir subviraje o sobreviraje. También tiene Selec-Terrain, que altera el control de tracción, los cambios y el mapeo del motor, en ajustes como Auto, Nive, Sport o Arena/Lodo.
El Active Drive II –opcional en el modelo Limited y estándar en la Trailhawk– incluye un radio de cambios de gama baja que acorta los cambios en un radio de 2.92:1 y y bloquea los ejes delanteros y traseros de forma conjunta, además de contar con control en descenso. Solo la Trailhawk tiene Active Drive Lock (foto), que incluye un bloqueo para el diferencial trasero, una modalidad Roca y control de ascenso en velocidad constante.
PRIMER VEREDICTO
La nueva Cherokee es una crossover más civilizada que la Jeep para chicos duros
LO BUENO
- Lleva el estilizado Jeep al futuro
- Refinada a velocidad
- Excelente automática de nueve velocidades
- Muy bien equipada
LO NO TAN BUENO
- Es más crossover que SUV
- Sin versión Trailhawk diésel
NOTA DEL PROBADOR
Tiene la silueta de la Jeep original en el lado bajo del entintado negro del parabrisas
JOHN SIMISTER
