Christian Horner no se olvidó de valorar la labor de Alexander Albon, que a su consideración, fue clave para el triunfo de Max Verstappen en Mónaco.
El fin de semana en el Principado no inició bien para el holandés. Al finalizar el jueves, expresó cierto descontento porque la dirección que se tomó en la puesta a punto. Al ser cuarto en el segundo ensayo, su déficit final fue de tres décimas ante Ferrari, que para ese momento impuso su ritmo.
Sin embargo, la contribución de Albon como piloto de simulador y reserva tuvo influencia tan significativa que, a consideración de Horner, influyó en el desarrollo del resto del fin de semana, junto con la fortuna favorable cuando Charles Leclerc no pudo arrancar.
«No estábamos en buena forma el jueves en Mónaco y Max no estaba particularmente contento con el auto, pero el trabajo detrás de escena, el trabajo que Alex ha estado haciendo en el simulador, todo ayudó a cambiar las cosas para el sábado», reveló Horner en su columna previa al GP de Azerbaiyán.
«Hicimos algunos cambios buenos en la puesta a punto, conseguimos que Max y Checo estuvieran mucho más contentos con el auto y, obviamente, Max quedó destrozado al perder la pole con la bandera roja».
«Todos entramos en la noche del sábado un poco frustrados, porque todos sabíamos lo difícil que sería adelantar, pero la desgracia de Ferrari se convirtió en nuestra buena suerte y era importante para nosotros aprovechar la oportunidad».
Baku by day 🌖 Baku by night 🌒 And the Bulls are back tomorrow 💪 #AzerbaijanGP 🇦🇿 pic.twitter.com/zQQyGbifL9
— Red Bull Racing Honda (@redbullracing) June 3, 2021
La victoria de Verstappen y el cuarto lugar de Pérez, combinado con el resultado malo de los pilotos de Mercedes, colocaron a Red Bull a la cabeza del Mundial de Constructores por vez primera desde 2013.
Además de agradecer la labor de los miembros de la agrupación en Milton Keynes, en especial en épocas como la pandemia de COVID-19 y el Brexit en Reino Unido, Horner espera que esto demuestre que el trabajo en equipo sigue siendo la médula espinal en la filosofía de trabajo.
«Hubo algunas sugerencias en la prensa de que el equipo había perdido algo de su agudeza de campeonato, pero los resultados en Mónaco muestran cuán rápido pueden cambiar las cosas, así como la narrativa», aseveró.
«Esperábamos que las dos últimas carreras fueran los baluartes de Mercedes y creo que lo más emocionante es que, salvo Portimao, hemos liderado en todas las carreras».
«Hemos estado allí y la fortuna y la mala suerte siempre se igualan a lo largo de la temporada, esa es la naturaleza del deporte y hay que tomar lo duro con lo suave».