Lewis Hamilton explicó el problema a largo plazo que ha surgido con el piercing que tiene en su nariz y que volvió a causar controversia este sábado con la FIA.
El británico fue llamado por los comisarios tras la práctica sabatina del Gran Premio de Singapur de F1 por no respetar la regla relacionada con el uso de joyería, misma que se reforzó en mayo; por motivos de seguridad, los piercings en el cuerpo o cadenas de metal para el cuello están prohibidos durante las sesiones.
Hamilton dejó en claro que su intención ya no tiene que ver con alguna cuestión de libertad de expresión, lo cual quedó en claro tras una conversación que tuvo con el presidente de FIA, Mohammed Ben Sulayem.
Pero a su vez, el uso intermitente de su accesorio comenzó a causarle molestias, motivo por el cual no puede dejar de usarlo de forma permanente.
«He tenido mis joyas y mi arete en la nariz durante años. Y obviamente, tuvimos toda esa conmoción a principios de año. En ese momento estaba soldado. Así que no se perdió», explicó tras la calificación en Marina Bay.
«Me dieron en su momento, por muchas carreras; me dieron… no uso terapéutico, sino como una exención, hasta que pudiera encontrar una solución. Y luego fui, me lo sacan y traté de encontrar una solución, me lo puse y me lo saqué. Se infectó por eso. Y yo seguía con esta infección. Tuve una ampolla de sangre y estaba hablando de eso (con FIA). Así que tenía bastante dolor en la nariz».
«Luego hubo (otras) cosas que les dije antes de la calificación. Y luego volví y tuve que tener el… asquerosamente, pero me arreglaron la ampolla de sangre porque había como pus, sangre y esas cosas».
«Y luego me lo puse, las últimas dos semanas comenzó a sanar y me pidieron que me lo quedara. Así que es una locura que obviamente tengamos que hablar de algo tan pequeño. Me quito todo lo demás. Y sí, en este punto, realmente no me importa ser honesto».
Starting P3 tomorrow, a lot we can do from the second row. Car felt great out there for most of it and it feels like there’s a real chance at a win tomorrow. Thanks always @MercedesAMGF1, heads down, see you tomorrow 🇸🇬 LFG!!! pic.twitter.com/SJHJMDkQ0e
— Lewis Hamilton (@LewisHamilton) October 1, 2022
Sin ser tan detallada, la FIA confirmó esta situación en la investigación que se realizó sobre Hamilton, quien con Ron Meadows, Director Deportivo de Mercedes, explicaron este desarrollo de eventos y mostró una carta de su doctor, explicando este tema.
Los comisarios consultaron al Delegado Médico Adjunto de la FIA, el Dr. Ian Roberts, quien revisó el informe médico y coincidió con su opinión. Por ese motivo, el británico no recibió ninguna sanción, que pudo incluir una suspensión para participar en Grandes Premios.
Sin embargo, a Mercedes se le multó con 25 mil dólares, ya que presentaron una declaración incorrecta en el escrutinio. A partir de Miami, las escuderías tienen que llenar un formato que demuestre que se sigue al pie de la letra el uso de los accesorios, pero no se incluyó el piercing de Hamilton.
“El director del equipo explicó que el equipo no sabía que HAM tenía un piercing”, se indicó. “En eventos recientes, HAM se había quitado el piercing antes de la competencia. El equipo asumió, sin preguntarle a HAM, que había seguido o seguiría el mismo procedimiento para este evento”.
“Los Comisarios Deportivos aceptan que el error en la declaración en este caso no fue intencional o deliberado, pero no habría ocurrido si el equipo hubiera hecho una consulta a HAM antes de la cumplimentación y presentación de la declaración”.
De cualquier forma, Hamilton reiteró su molestia por el manejo de esta situación, reiterando que la aplicación de la regla no necesariamente es consistente con la seguridad.
«Nuestra cremallera es de metal, nuestra hebilla alrededor de nuestro casco es de metal, los cables que tenemos tienen metal. Así que es un poco tonto», dijo.
«Ojalá sean sensatos. Los comisarios deberían estar ahí para mantenernos a salvo, lo más importante, pero esto no es un problema de seguridad».