Si siempre amaste el estilo lindo y dulce del FIAT 500, pero no firmaste sobre la línea punteada debido a los aspectos prácticos de la vida, es posible que tus oraciones hayan sido respondidas. Esta es la 500X nueva, la última rama en crecer el árbol familiar del FIAT 500. La transformación de auto urbano a pequeña SUV le ha dado a la 500X una cabina mayor y un par extra de puertas traseras, así que aparte de verse chic, ahora también puede llevar a los niños a la escuela.

Este mercado es competitivo y aunque la versión diésel es buena, los motores de gasolina aún son populares en este sector, por lo vale la pena examinar la versión Multiair de 1.4 litros y 138 caballos. El motor turbo de cuatro cilindros es refinado y ágil, llevando a la 500X de 0 a 100 kph en 9.8 segundos muy respetables. Se pondrá vocal al revolucionarlo fuerte, pero nunca áspero, aunque al acelerarlo con fuerza hay un vacío curioso después de cada cambio. Aparte de eso, se desempeña bien, con un torque amplio desde las 1,500 rpm para transportarla en cualquier engrane que se te antoje.

La caja de seis velocidades es de acción suave y de recorrido corto y bueno, pero la dirección no está tan pulida. Es directa, pero no tiene suficiente peso, independientemente de la cantidad de giro que apliques y también está falta de sensación, lo cual hace complicado medir tu volanteo. Una vez que te adaptas y adquieres confianza, el agarre es decente y hay poco rolido de carrocería. Cuando, a la larga, los neumáticos se dan por vencidos, el frente simplemente se va ancho. No es exactamente emocionante, pero al menos significa que la 500X se siente segura.

Habiéndola probado con rines de 17 y 18 pulgadas, podríamos decir que menos es más si valoras la comodidad de manejo. FIAT nos dejó probar el auto en algunos caminos bastante golpeados y la 500X es notablemente más suave con los de 17. Aun así se mueve ligeramente sobre los baches, pero no más que SUVs similares.

FIAT no siempre obtiene buenos comentarios de la prensa cuando se trata de la calidad de cabina, pero el interior de la 500X es excelente. Tiene bastante estilo, e incluso así los materiales se sienten más germanos que latinos. Todas las superficies importantes son agradables al tacto, los interruptores están bien amortiguados y la cabina se siente responsiva al reto de un uso familiar riguroso. Los asientos son cómodos y la posición de manejo es justa.

Tiene bastante espacio para los ocupantes, abundante al frente para pies y cabeza y suficiente en la parte trasera para sentar a tres niños o a dos adultos con facilidad. El espacio de la cajuela es generoso y tiene forma adecuada, ofreciendo 350 litros –volumen similar al de sus rivales– junto con asientos fácilmente plegables que dejan una cubierta de carga plana.

El motor 1.4 de gasolina no tiene el equipamiento en la versión básica Pop, por lo que todos los modelos Multiair cuentan con un sistema de infotenimiento con pantalla táctil que incluye Bluetooth y sonido. Las versiones que probamos tenían la pantalla mayor, 17 cm, y navegador satelital (ambos estándar en versión Lounge y Cross Plus) el cual fue fácil de entender.

Se han vendido más de 200,000 Fiat 500 en GB, así que es claro que a la gente le fascina la marca, y la 500X encaja en la alineación muy bien. Todavía tiene el estilo para ganarse tu corazón, pero ahora, gracias a su cabina espaciosa, sus precios sensibles y sus niveles del equipamiento decentes, tu cabeza está de su lado.

Hay espacio para mejorar, pero eso no debe impedir que la 500X aparezca en tu lista de compras. Y si el camino a la escuela es lo suficientemente corto como para que no quieras perseguir ese kilometraje adicional por litro, puedes ahorrar el cambio y elegir la versión más suave de gasolina en lugar de la diésel.