El director técnico de Racing Point, Andrew Green, reveló que la FIA visitó la fábrica del equipo para verificar su modelo RP20, quedando satisfecha con los resultados.
El monoplaza causó revuelo en las pruebas de pretemporada debido a su parecido con el Mercedes W10, que logró los títulos mundiales de Fórmula Uno en 2019.
Dentro del paddock se calificaba al auto como un «clon» de la casa anglo-alemana, al grado de apodarle «Mercedes rosa». También hubo sugerencias de que los resultados del equipo se protestarían en Melbourne, de haberse corrido el Gran Premio australiano; Renault ha dicho que no descarta una queja legal en el futuro.
Pero Green defendió dicha legalidad, en una entrevista exclusiva con Autosport.
«Realmente no sabemos cuál es el motivo por el que piensan protestar», dijo. «Cuando el auto se lanzó, hablamos con la FIA al respecto, la FIA vino a la fábrica, miraron lo que habíamos hecho y los diseños del automóvil».
«Incluso tomaron los datos de diseño de Mercedes para su auto del año pasado y los compararon con los nuestros. Hicieron una verificación exhaustiva».
«Y ellos están completamente contentos de que el auto que tenemos en la pista haya sido diseñado por nosotros. Puede tener algunas similitudes con el Mercedes, pero es similar. No es lo mismo. Y, por lo tanto, no hay (espacio para) protesta allí».
«Pueden gritar y hablar tanto como quieran, pero creo que lo que realmente están gritando y hablando es el hecho de que se han perdido un truco. Y eso es lo que les molesta».
La FIA ratificó los comentarios de Green cuando fue contactado por Autosport.
El RP20 es el primer coche de Racing Point que se diseña completamente desde que el consorcio de Lawrence Stroll compró la agrupación y aumentó sus recursos, en comparación con el final de la era Force India.
El vehículo presenta la misma filosofía de «rake» bajo (el ángulo de inclinación respecto al suelo del plano horizontal) que Mercedes ha implementado por años, por lo que Racing Point ha abandonado el enfoque inspirado en Red Bull que ha durado mucho tiempo.
Esto implicó un compromiso de diseño significativo para integrar una caja de cambios acorde, misma que el equipo compra a Mercedes.
«No había obligación de trasladar una sola cosa en 2020, donde siempre había habido una gran presión hasta ese momento para trasladar un porcentaje significativo del auto, dependiendo del tipo de situación financiera en la que estuviéramos», comentó Green sobre el cambio en el concepto de diseño.
«Siempre se arrastró algo significativo, y este año fue la primera vez que tuvimos una hoja limpia y pudimos optimizar lo que le estábamos comprando a Mercedes. Y parecía tan lógico, ¿por qué luchar contra eso?».
«¿Por qué luchar contra este concepto que han estado ejecutando y el concepto que habíamos adoptado? ¿Por qué no simplemente alinear los dos e ir desde allí? Lo que obviamente significa un auto completamente nuevo con cero arrastre (del pasado)».