En caso de que alguien requiera un Charger SRT pero con tres filas de asientos, una cajuela enorme, y una gran capacidad de arrastre, Dodge presentó la renovada Durango SRT, cuya principal novedad es el corazón que esconde bajo el cofre: un V8 de 6.4 litros (392 C.I.D.) que entrega 475 caballos y 470 libras-pie de torque, cifras que le permiten –según Dodge- acelerar de 0 a 100 kph en apenas 4.4 segundos, así como conseguir los 400 metros en 12.9.
Por fuera los cambios son evidentes también, y acordes con sus capacidades dinámicas elevadas. Estrena fascias, parilla, faros y cofre, con entradas de aire que incrementan esa sensación de poder. Los rines también son de nuevo diseño y dejan entrever el sistema de frenos Brembo, con enormes discos y calipers para detener sus más de dos toneladas con la misma eficacia con la que acelera.
La suspensión ha sido reforzada y es hasta un 16% más firme, lo que aunado a las ruedas de 20” con pisada de 295 mm en ambos ejes, promete un desempeño dinámico más satisfactorio y preciso, aunque no le podemos llamar deportivo. Se podrán elegir entre dos tipos de compuesto para las llantas, así como hasta siete modos de conducción al giro de una perilla, desde nieve hasta pista. Desde luego abundan los emblemas SRT y demás detalles que nos recuerdan que estamos en la versión más especial de la Durango, como los asientos y el volante, por ejemplo. No se sabe todavía si llegará a México.