El GP chino estuvo cercano a cancelarse por las condiciones climáticas que se preveían para el domingo, lo que hizo que corriera el rumor de que podría adelantarse al sábado, pero esto es imposible.
La idea se generó en una junta de Charlie Whiting con directivos de equipos, pero sólo se discutió brevemente, nunca fue una posibilidad verdadera.
La realidad es que la FIA no tiene el poder para decidir esa cuestión, gracias a la complejidad y variedad de contratos necesarios para organizar un gran premio de Fórmula Uno.
Sería imposible, además, por la logística necesaria para traer al público, pues buena parte de los compradores de boletos sólo van el domingo a la carrera, entonces obligarlos a ir el sábado haría que mucho no pudieran asistir y eso podría traerle demandas a la F1.
Los patrocinadores, canales de televisión y aficionados no estarían contentos, así como FM perdería su seguro en caso de cancelación.
Por lo tanto, es imposible que la F1 se corra otro día que no sea domingo, sin importar cómo esté el tiempo ese día.