Silverstone incrementó el número de oficiales de pista y policías para tratar de evitar situaciones como la protesta que ocurrió en el Gran Premio de Gran Bretaña del año pasado.
En aquella ocasión, manifestantes a favor del medio ambiente se metieron a la pista, momentos antes del arranque de la competencia, aunque el accidente múltiple de la primera curva evitó que los autos de F1 llegaran a la zona a velocidades altas.
Sin embargo, a los seis individuos arrestados se les impuso una sentencia suspendida de doce meses en prisión, teniendo que cumplir con servicio comunitario y otros requerimientos administrativos.
Ayer miércoles, manifestantes que representaban a «Just Stop Oil», el mismo grupo que invadió la pista hace un año, irrumpió en una de las canchas de Wimbledon y roció confeti y piezas de rompecabezas. También han ocurrido eventos de esta índole en otros eventos deportivos recientes.
Esto ha generado una movilización entre los promotores de Silverstone, ya que se esperan al menos 450 mil asistentes a partir de este jueves y hasta 160 mil para el domingo. Si bien respalda el mensaje y punto de vista de la gente que está protestando, Lewis Hamilton exhorta a la gente a no exponerse de esta forma.
«Apoyo a las protestas pacíficas», declaró el piloto de Mercedes este jueves.
«Creo que, al menos desde mi perspectiva, y creo que la de mi equipo, estamos muy, muy centrados en la sostenibilidad. Creemos en aquello por lo que lucha la gente. Y estamos haciendo esos cambios como deporte».
«Pero la seguridad es clave. No queremos que nos pongan en peligro y no queremos poner a nadie más en peligro. Entonces, si hubiera, si hubiera uno, esperamos que no sea en la pista».
Para minimizar riesgos, la Policía de Northamptonshire informó este jueves las medidas que tomarán para el Gran Premio.
Lo principal es el incremento de elementos policiales, desde uniformados y detectives vestidos de civil que patrullan el circuito, campamentos y red vial, hasta equipos especializados que incluyen oficiales armados, equipos de búsqueda, agentes de interrupción y unidades de Reconocimiento Automático de Matrículas (ANPR, por sus siglas en inglés).
Por primera vez, se utilizará reconocimiento facial en tiempo real el sábado y domingo, con el único propósito de combatir el crimen y proteger a las personas asistentes.
Esta tecnología funciona escaneando rostros con una cámara para comparar datos biométricos con los que están en una lista de individuos que la policía tiene y que considera como «el mayor riesgo de peligro para el público en general». A nivel de pista, habrá alrededor de 100 oficiales más que en la edición del año pasado.
Pese a estas medidas reforzadas, varios pilotos piden reflexionar sobre el peligro que implicaría volver a invadir la pista.
«Espero que no sea así, pero si sucede en el paddock y cosas así, supongo que probablemente cause diferentes escenarios. Pero simplemente no puede suceder en una pista de carreras porque pones en peligro la vida de personas reales», afirmó Lando Norris.
«Supongo que no es sólo la gente que lo está haciendo en el circuito, no sé si se dan cuenta de las consecuencias de lo que puede pasar, pero las consecuencias serían bastante extremas. Así que no lo sé. Creo que es mejor no pensar en eso, pero parece que está sucediendo cada vez más».
«Ellos tienen derecho a hacerlo, pero hay un momento y un lugar, y eso sólo debe entenderse porque también tiene consecuencias para las personas que conducen en la pista, como nosotros. Realmente no lo sé, pero al final del día simplemente no puede suceder en la pista. Creo que es bastante simple. Si lo hacen, entonces las consecuencias por separado deberían ser bastante graves, diría yo».