Muchos piensan que desde hace algunos años estamos viviendo en la época dorada nueva del motociclismo, con la paridad competitiva que se ha alcanzadO, pero aún en la igualdad, siempre hay animales –mitológicos– más iguales que otros animales, como dice NUESTRO EDITOR orwelliano al tratar de descubrir quién es el mejor centauro del mundo hoy en día

Los centauros actuales

Actualmente hay muchos jinetes de dos ruedas que ya no corren como los del pasado en diversas categorías y se han concentrado en usar las clases inferiores (125cc que se volvió Moto3, y 250cc que se convirtió en Moto2) como trampolín para llegar a la superior (500cc que se volvió MotoGP). El especialista en clases chicas como Ángel Nieto (campeón en 50cc y 125cc exclusivamente), no existe más y los pilotos que vamos a considerar han sido campeones en las clases inferiores en camino a sus títulos en las superiores.
Tras platicarlo un poco, se determinó que sólo hay tres que podrían aspirar al título del mejor centauro, y probablemente los tres entren a la lista de los grandes de todos los tiempos al finalizar sus carreras deportivas. Ellos son:

 

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MARC MARQUEZ
Nacido en 1993, el catalán es el más joven de los tres contendientes actuales. También es el piloto más joven en ganar el título de la clase principal (20 años) y también el bicampeón más joven, además de haber ganado el título en las clases inferiores (125cc y Moto2) en su camino a MotoGP.
Marc es conocido por un estilo muy peculiar que tiene de tomar las curvas patinando la llanta trasera además de ser el que más logra inclinar la moto, hasta 60 grados ocasionalmente al curvear gracias a su estilo de colgarse del asiento con un pierna, a lo cual ayuda su tamaño pequeño, que también es una ventaja ligera a la hora de enconcharse en las rectas para mejorar la aerodinámica.
Gracias a sus conexiones con el patrocinador REPSOL fue reclutado como campeón de Moto2 para subir al equipo oficial de Honda en 2013 y respondió ganando el título sobre su coequipero, Dani Pedrosa, quien era el favorito de la escuadra nipona a quien ha opacado desde entonces. Su estilo de tomar la punta y separarse de inicio es muy apreciado por los aficionados, y su corrida de 10 triunfos para iniciar la campaña 2014 es asombrosa dados los estándares actuales de competitividad. Sin embargo en 2015 fue superado ampliamente y se volvió un niño caprichoso que al sentirse vencido injustamente por Rossi en Argentina –donde chocó al italiano y le echó la culpa del golpe, y en Holanda, donde lo sacó del camino y el italiano se fue por la trampa de arena para ganar–decidió asegurarse que el italiano no ganara. Lo logró al molestarlo constantemente en las carreras, dejando pasar a Lorenzo para entablar batalla con Rossi, y culminó con el choque en Malasia que le costó a Rossi arrancar desde la cola en la final en Valencia, y en consecuencia el título.
Su falta de madurez profesional le hizo perder muchos adeptos, pero su carácter mostró que cuando su moto no es la mejor no pone el mismo entusiasmo en su manejo que cuando tiene una moto buena y entonces se vuelve un centauro dominante.
Pero sus números ya son impresionantes, especialmente en materia de posiciones de privilegio, donde tiene casi tantas como sus rivales actuales. Y ya pasa de 50 triunfos en el Mundial.
Apenas está en su cuarta temporada de MotoGP y si dura otros 10 años, bien podría convertirse en el mejor de la historia, al menos estadísticamente. Y tendrá tiempo suficiente para madurar…

 

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JORGE LORENZO

El mallorquín nació en 1987 y debutó en el mundial en la clase de 125cc a los 15 años, al igual que su rival Márquez. Sin embargo, nunca fue campeón en la clase inferior, pero se repuso con un bicampeonato para Aprilia en la clase 250cc –2006-2007– antes de ser contratado por Yamaha para su equipo oficial de MotoGP.
Su debut en la clase superior fue con una PP en Katar en 2008, y quedó segundo, tercero y primero, respectivamente, en sus primeras tres carreras. Desde el inicio se le vio destinado a ser un centauro grande y aunque terminó el año en cuarto sitio, no desmereció ante su líder de equipo, Valentino Rossi, de quien aprendió mucho en materia de poner a punto la motocicleta de la firma de los tres diapasones. Y para 2009 le disputó el título a su líder, aunque varias caídas en la campaña lo relegaron a ver la coronación de Rossi, nuevamente. Pero cuando Valentino se cayó en la primera mitad de la campaña y se perdió cuatro fechas en 2010, Jorge estaba listo para tomar la estafeta y darle un tercer título consecutivo a Yamaha en la clase superior del Mundial.
Su campeonato sirvió para aumentar la tensión con Rossi, y el italiano decidió irse y lo dejó como líder indiscutido de Yamaha, con la que Jorge pudo conseguir otro título en 2012 y no tuvo empacho en aceptar el regreso del italiano para 2013. La rivalidad se mantuvo, sin alcanzar niveles de guerra, pero en 2015 se calentó de nuevo cuando Valentino denunció que Jorge estaba siendo ayudado por Marc a conseguir el campeonato, y resultó cierto, pero sin que Jorge alentara el hecho. Sin embargo, Jorge manejó impecablemente cuando tuvo que hacerlo, pero los puntos no le hubieran alcanzado sin la sanción a Rossi para la carrera final, en la cual logró su tercer título, el mayor número de un hispano en la historia.
Actualmente Jorge ha anunciado que deja a Yamaha para irse a Ducati en 2017, en un movimiento que fue forzado en cierta forma por Rossi refirmando para el bienio 2017-18 con Yamaha. Lorenzo, quien llegará a Ducati con 30 años cumplidos, no puede ser el número uno en un equipo en el cual está Rossi, y este proyecta una sombra muy larga para sus coequiperos, así que la única forma de escaparse de este dilema es emigrar y buscar el camino propio, además de ser el quinto centauro en obtener un título con marcas distintas en la clase superior. Pero bien podría irse con un cuarto título si sigue teniendo las actuaciones consistentes que lo han caracterizado pues sólo se ha retirado siete veces y ganado 37 en las últimas siete campañas. Es una apuesta arriesgada, pero probablemente sólo él podría cumplirla satisfactoriamente.

 

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VALENTINO ROSSI

Hijo de un antiguo piloto del mundial de motos, el italiano tiene 37 años ya y sigue ganando, habiendo obtenido un Grand Slam –victoria, PP, VR y liderado todas las vueltas– en Jerez en abril pasado para su victoria 87 en la categoría superior del Mundial de Motociclismo.
Inició en la clase de 125cc a los 17 años de edad y fue campeón a los 18; en 1998 pasó a 250cc y al año siguiente fue campeón, por lo que se graduó a la clase superior, entonces 500cc en 2000 y, siguiendo el estilo se coronó en su segunda campaña para obtener su tercer título distinto. De 2002 en adelante la clase superior pasó a llamarse MotoGP y Valentino ha obtenido otros seis campeonatos desde entonces con Honda y Yamaha, pero su momento más bajo vino en 2010-11 cuando corrió para Ducati y no obtuvo triunfo alguno, algo inédito en sus otras 19 campañas.
Sin embargo, Valentino, con su número 46, es el piloto con más triunfos en la clase máxima y está a 9 de empatar el récord de todos los tiempos de Giacomo Agostini. Por algo se le conoce como “The GOAT” (traducción literal “La Cabra”) que en realidad es un acrónimo que significa Greatest Of All Time, o sea, el “Más Grande de Todos los Tiempos”; el acrónimo no está muy lejos de la verdad y con dos temporadas y media por delante, nada está fuera de su alcance en materia de récords, excepto el de títulos que tiene Agostini con 15, pues Rossi no llegaría a esa cifra pues ya no hay jinetes que corran en varias categorías al mismo tiempo como hace 40 años.
El lugar de Rossi en el panteón de los grandes está asegurado cuando retire, pero actualmente Valentino está buscando el décimo título para su cuenta y a los 37 años está compitiendo al tú por tú con tipos que podrían ser sus hermanos menores, muy menores, o quizás hasta sus hijos, y batiéndolos. Su debilidad siempre ha sido la calificación, a diferencia de Lorenzo, pues tiene el mismo número de PPs con casi 100 carreras menos para el español; ahora él se ha enfocado a calificar mejor y no quedar en la segunda fila o más atrás, para no dejar tanta ventaja a sus rivales en la arrancada y lo ha logrado, pues en las primeras cuatro fechas iniciales de 2016 ha calificado en primera fila en las cuatro, algo que no había logrado en esta década.
Lo más importante es que se sigue divirtiendo y por eso ha firmado para seguir corriendo hasta que esté a punto de cumplir 40 años de edad. No en balde es el mejor piloto del mundo, todavía, y hace cosas que sus rivales apenas contemplan con una década de diferencia. A la vez, para los españoles, ser mencionados en la misma categoría que Rossi es, en sí mismo, una victoria.