- EL REEMPLAZO DEL LAMBORGHINI GALLARDO ENTREGA 602 CABALLOS EN UN V10
- 0 A 100KPH EN 3.2S
- UN CÚMULO DE NUEVOS APOYOS PARA EL CONDUCTOR
- A LA VENTA EN EL OTOÑO DE ESTE AÑO
Lamborghini reveló su nuevo súper auto, el Huracán. El modelo de tracción total está propulsado por un motor V10 que produce más de 600 caballos y tiene una velocidad tope por encima de los 320 kph. El Huracán reemplaza al Gallardo en el elenco de Lamborghini y se espera que ruede en las calles en el otoño luego de su debut en público en el Salón de Ginebra.
Se había anticipado que el modelo se llamaría Cabrera, pero Lamborghini optó por Huracán –o Huracán LP610-4, su nombre completo– para cumplir la convención de llamar a sus autos en honor a toros de lidia famosos; Huracán fue un animal legendario que se lidió en Alicante, España, en 1879.
El Huracán sigue la fórmula del Gallardo, el auto más vendido en la historia de Lamborghini con 14,022 unidades producidas en 10 años de venta. El Huracán renueva el asalto de Lamborghini al disputado segmento de súper autos, con más potencia y desempeño, nuevos detalles, nuevo interior de alta calidad, un nuevo aspecto inspirado en el Aventador, y lo que la firma llama un “paquete tecnológico innovador”. Muchas prestaciones parecen atender las críticas principales al Gallardo, que resentía su edad ante rivales más poderosos, modernos y de mayor calidad como el Ferrari 458 y el McLaren 12C.
El chasis del Huracán, de motor central, mezcla aluminio y componentes de fibra de carbono, los cuales, según Lamborghini, dan “precisión de auto de carreras con rigidez sobresaliente”. El chasis se compartirá con el Audi R8 de segunda generación, que viene en 2015. Lamborghini consideró el uso de un monocasco de fibra de carbono para el Huracán, pero la firma matriz, Audi, decidió que era muy costoso para asegurar la economía de escala necesaria para el R8. Se entiende que el chasis está recubierto con una mezcla de aluminio y paneles de plástico reforzados con fibra de carbono para la carrocería.
El Huracán es apenas más grande que su predecesor de 4,345 mm de largo, 1,900 mm de ancho y 1,165 mm de alto, y un incremento ligero en la distancia entre ejes (2,560 mm), deberá mejorar el espacio en la cabina.
Pese a mayor uso de materiales ligeros, el peso del Huracán subió sobre el Gallardo, de 1410 kg a 1422 kg, quizás por los detalles en el interior y a la tecnología dinámica que se incorporó en una combinación que, Lamborghini dice, es de “desempeño absoluto con un comportamiento callejero de fácil manejo” y un “acabado lujoso y con orientación deportiva”.
Tiene un V10 de 5.2 litros normalmente aspirado, tan refinado desde su uso en el Gallardo, que Lamborghini lo llama “Nuevo”; tiene sistemas de inyección directa e indirecta, da 602 caballos a 8,250 rpm y 413lb ft de torque a 6,500 rpm,. La velocidad tope está “arriba de los 323 kph” del Gallardo LP560-4, y el Huracán va de 0-100 kph en 3.2s y de 0-200 kph en 9.9s, pero no habrá caja manual para el Huracán, sólo la transmisión automática de doble embrague y siete velocidades, llamada Lamborghini Doppia Frizione (LDF). Su consumo mejora a 9.35 kpl y las emisiones bajan a 290 g/km.
Un interruptor al volante permite escoger tres opciones dinámicas —Strada, Sport o Corsa— que ajustan los mapeos de motor, caja y tracción total para modificar el comportamiento en la ruta y el manejo se mejoró con el sistema de dirección Lamborghini Dynamic Steering, pero hay frenos de carbono-cerámicos para mayor seguridad. Los amortiguadores magnetoreológicos son opcionales.
El diseño se deriva del Aventador, incluyendo los bordes filosos del perfil, luces LED y la cubierta hexagonal del motor. El interior es de alta calidad y tiene cuero Nappa con detalles de Alcantara, pero destaca una consola central de 31 cm para los instrumentos, con más opciones multimedia y una sensación más lujosa, además de opciones adicionales.
El auto inició producción en Sant’Agata esta primavera y se espera que cueste un poco más que el Gallardo, además de la elaboración de versiones, spyder, de tracción en dos ruedas, especiales y conmemorativas únicas, como acostumbra la firma italiana.
Por Mark Tisshaw