La segunda generación de la VW Tiguan hizo su debut oficial en el Salón norteamericano. Fabricada en México para todo el mundo, la nueva SUV estrena plataforma –ahora es MQB-, un diseño más elegante y refinado, interiores tan buenos que parecen los de un Audi de hace muy pocos años, sistemas de asistencia a la conducción e infotenimiento, y hasta el motor, que si bien está basado en el 2.0TSI que ya conocemos en otros modelos, estrena sistema de inyección, así como la gestión del tren de válvulas. Es algo así como los motores “Ultra” que tienen algunas versiones del A4, por ejemplo; esas que dan 190 caballos.
En el caso de la Tiguan entrega 184 caballos y un torque de 221 libras-pie, acoplado a una transmisión automática de ocho velocidades y tracción delantera. Opcionalmente puede ser integral 4Motion. Pero el aspecto más destacado de la Tiguan II es su tamaño, pues ha crecido hasta llegar a los 4.70 metros de largo, que ahora sí la colocan justo en pelea directa con modelos como Ford Escape, Nissan X-Trail, Honda CR-V, Toyota RAV4, etc.
Con este aumento de tamaño incluso cabe una tercera fila de asientos que sí se ofrecerá en EUA; los detalles de versiones, precios, equipamientos y motores para México los conoceremos dentro de poco. Esta versión de Tiguan se exporta a Europa en donde se le agrega el apelativo “Allspace”, y se vende junto con una variante más corta (similar en tamaño a la actual) fabricada en el Viejo Continente. En Puebla sólo se hace la versión más grande.