POR CARLOS JALIFE • @ Scuderiargz

Se llama deporte motor, no espectáculo motor, y en él deberían existir esas ideas medio raras de honor y competencia y cosas por el estilo que muchas veces se piensan anticuadas. Por definición, si hay un ganador tiene que haber perdedores, pero la sociedad moderna quiere que todos ganen y por eso proliferan premios y se dan puntos como en NASCAR a todos, cuando, por ejemplo, en la F1 se daban a los cinco primeros cuando inició la serie. Y podrán decir que hay que cambiar con los tiempos, pero yo sigo viendo que en los Juegos Olímpicos premian a los tres primeros y punto, nada de burradas de darle puntos al que llegó en el sitio 43. Eso simplemente genera que los maletas se excusen diciendo que lograron “puntos valiosos” cuando en la mayoría de las series les dan puntos a todos los que arrancan.

Pero más interesante es el argumento de los que lloran cuando no les salen las cosas, como el dueño de RBR que amenaza con salirse de la F1 si sus autos no ganan, y no dice “ser competitivos”, sino “ganar”. O sea, ¿invierto mi dinero para ganar y si alguien lo invierte mejor y me bate porque tiene más tradición o mejores elementos humanos y técnicos, entonces hago mi berrinche y me voy? Eso es no ser deportista.

Tampoco es deportivo pedir exenciones porque estoy muy nuevo y no sabía que iba a estar tan difícil hacer un motor híbrido V6 y creí lo que decía mi papi Ron de que iba a llegar a dominar como si estuviera en los 80 todavía. En el deporte ganas unas y cuando pierdes simplemente elevas tu nivel para ser mejor la siguiente vez. Si no puedes batir a los otros, cuando menos compites por mejorar lo tuyo. Vean a los de Manor que iniciaron el año con cinco segundos de desventaja y ahora ya están a tres y pico, lo cual es un logro inmenso y no lloran por que no ganan nunca, ni le echan la culpa a su proveedor de motores por las fallas. Digamos hay formas de perder y la de los de RBR y Mc-H son las de los malos perdedores (aunque Bernie dice que no hay malos o buenos, todos son simplemente eso, perdedores).

Hablando de los que le echan la culpa a otros, (practicantes de la gustada sección “la paja en el ojo ajeno…”), tenemos a Marc diciendo que no castigan a Valentino por ser quien es. Evidentemente ya se creyó que él es el mejor de la historia porque batió a un VR ya mayor (14 años más que él) con una moto mucho mejor (la Honda llevaba dos años bailando a la Yamaha), pero ahora que la Yamaha mejoró y le están pegando, MM se cae, comete errores y luego le pega al 46 por atrás (codo y pierna), lo saca de la pista y como el otro no se cae, sino que acelera, corta la chicana y le gana, entonces pide castigo al italiano por algo que él provocó.

Y como el castigo no viene, entonces resulta que le tienen consideraciones especiales al 46. Por favor… nada más vean la repetición: si Rossi nunca hubiera frenado, usó a la Yamaha para frenarse cuando entró pasado y casi se lo lleva igual que en Argentina, donde no lo tiró de milagro. ¿Consideraciones especiales? ¿De una promotora española que siempre ha defendido a sus pilotos, como por ejemplo cuando las controversias con Simoncelli a quien no podían batir en la pista? Mmm…

Pretextos, por aquí, por allá y el caso es que todos serían ganadores si no fuera por los reglamentos, los proveedores, los árbitros, las condiciones climáticas y demás cosas que atentan contra la perfección prístina. Hasta parecen “panboleros” explicando porqué no llegaron al quinto juego.