Las cifras más recientes demuestran cómo las ventas de Jaguar Land Rover se han incrementado y la compañía esta rebosante de salud. Es difícil creerlo, pero hace cuatro años, JLR perdía dinero y necesitaba desesperadamente un préstamo por 800 millones de dólares (MDD) para mantener a la compañía a flote luego de la crisis crediticia.
Tata, el dueño de JLR, acudió al gobierno británico para un préstamo a corto plazo en 2009. Pero el proceso fue lento y se acusó al gobierno de buscar un asiento en el consejo de JLR a cambio del rescate. Al final, Tata aseguró el préstamo en bancos privados.
La solidez del regreso de JLR desde ese punto puede verse en las cifras de ganancias. Al año siguiente del préstamo, JLR tuvo ganancias por 10,300 MDD. En el año financiero que terminó en abril 2013 se embolsó 25,200 MDD, un incremento del 140%.
Aún más notable es la ganancia de JLR antes de impuestos. Al salir de la crisis crediticia, la compañía ingresó 557.5 MDD, una cifra admirable en las circunstancias del mercado. Para abril de 2013, eso se incrementó hasta una notable cantidad de 3,833 MDD, y se espera que salte hasta 4,400 para abril próximo.
Hoy, JLR está invirtiendo más de lo que genera en utilidades anuales, para expandir su línea de producción y llevar todos sus modelos a tres plataformas básicas, con la mayoría de los modelos impulsados por un nuevo rango de motores de cuatro cilindros. También invierte en una fábrica en coinversión en China.
Aunque ambicioso, también es potencialmente riesgoso. Hasta abril JLR tenía ganancia, después de impuestos, de alrededor de 1,917 MDD, pero está gastando 8,000 MDD este año y el próximo en inversiones en nuevos productos y nuevas fábricas. Este auge intenso ayudará a producir la nueva familia Discovery de cinco modelos (que también remplazará a la Freelander), la nueva planta de motores de cuatro cilindros en Wolverhampton, la nueva plataforma de aluminio de Jaguar, así como el nuevo sedán compacto y la nueva SUV.
Pero JLR deberá sacar dividendos enormes. Los costos se abatirán, pues la familia grande de modelos Range Rover y Discovery 5, se construirán todos en la misma plataforma de aluminio y la Evoque y las futuras Discovery bebés serán construidas en la misma plataforma de acero. También habrá ahorros cuando JLR cambie a sus propios motores de diésel y gasolina “Hotfire”, en lugar de comprar unidades de los fabricantes automotrices rivales, como ocurre ahora.
En la trayectoria actual, JLR podría estar construyendo 750,000 autos a mediano plazo, bien arriba de sus ventas globales de 357,773 unidades el año pasado. El sedán compacto de Jaguar y la SUV podrían agregar 150,000 unidades para 2017, y Land Rover espera que las nuevas Discovery bebés superen a su predecesoras Freelander. Un rediseño mayor en para el XF (que tendrá los nuevos motores Hotfire) también deberá impulsar la presencia de Jaguar en uno de los segmentos más rentables de la industria.
Menos de una década después de un potencial rescate financiero por parte del gobierno, JLR deberá convertirse en la compañía más exitosa en la historia de la industria automotriz nativa de Gran Bretaña.
