Acura se ha ayudado de la tecnología que Honda desarrolló en la era hibrida de la F1 y del trabajo de más de diez años en IndyCar para producir el prototipo ARX-06 que debutará esta semana en Daytona.
Honda tuvo una etapa con altibajos de 2015 a 2021 en el Gran Circo, pasando de los problemas interminables de confiabilidad con McLaren hasta el primer campeonato que Max Verstappen obtuvo con Red Bull.
En el proceso, el brazo estadounidense de la compañía, Honda Performance Development (HPD) consolidó la calidad de sus motores de combustión interna, cuya formula V6 doble turbo, de 2.2 litros, ha estado en la serie estadounidense desde 2012.
HPD, que también opera el programa de Acura en IMSA, se benefició de la experiencia de ambas divisiones para presentar el ARX-06, que tiene un V6 de 2.4 litros con dos turbocargadores (la misma fórmula que Indy iba a introducir en 2024 pero acabó cancelándose), generando 500 kW medido en el eje trasero por medidores de torque.
Con dimensiones de 5100mm de largo, 2000mm de ancho y 1060mm de altura, tiene como base el chassis ORECA LMDh aprobado por FIA, ACO e IMSA, sumando su sistema de control del tren motriz híbrido, uno de freno por cable, uno de control dinámico y una plataforma de hardware de sistema electrónico con especificaciones de F1.
Siendo un trabajo que inició hace dos años, y cuyo primer resultado se verá en las “24 Horas de Daytona”, en el debut de la clase GTP/LMDh, la directiva de HPD hizo muchas simulaciones para realizar la mejor convergencia posible entre ambas tecnologías, que fue el primer paso en el desarrollo del concepto motriz.
«Somos una empresa de carreras, construimos nuestros propios sistemas de propulsión, alguna economía de escala, ya sea a través de herramientas de simulación, banco de pruebas o ensamblaje», comentó David Salters, responsable de HPD, en una mesa redonda de directivos durante el invierno.
«Si estás mirando al futuro, intentas hacer lo mejor que puedes y estás en otras series de carreras, sería bastante tonto no intentar combinar eso para encontrar eficiencia. Estamos locos, pero no tan locos. Hay algo en común: comienza así y luego diverge a medida que la misión se vuelve diferente».
«HPD ha existido durante 30 años, 30 años de cosas que se han involucrado. Pero había que hacer el mejor motor nuevo de carreras para el futuro, y también tenía que haber cosas diseñadas a medida, porque una carrera de 24 horas equivale a cinco Grandes Premios seguidos».
Salters trabajó en Fórmula 1 durante varios años, en la eras V10 y V8 en Mercedes-Benz y, desde el otoño de 2006 hasta 2015, en Ferrari, bajo las órdenes de Mattia Binotto. Se unió a Honda posteriormente, pero en el programa de IndyCar.
En sí, su experiencia en el desarrollo tuvo ventaja ante sus rivales, aunque cuidar la calidad de todas las áreas del vehículo ha sido un reto durante las etapas de desarrollo del mismo.
«Estamos tratando de hacer todo tipo de cosas; esa es la diversión de estos autos: son el futuro, son geniales», dijo.
“Estamos tratando el frenado, estamos tratando la regeneración, generando energía para cargar la batería, estamos tratando el frenado con el motor y administrar el sistema de freno por cable, todo eso aparentemente hace un ruido extraño».
“En términos de cómo regeneramos, frenamos, manejamos el freno motor, todo ese tipo de cosas, también estamos tratando de proteger algunas de las partes. No deseas que la línea de transmisión oscile y altere otras cosas, por lo que cuando hace estas cosas, debes programar eventos para que no intentemos dañar las piezas».
Salters ha destacado el intercambio en capital humano con Honda Racing Corporation, entidad que asumió las actividades deportivas de la compañía cuando cerró su programa de F1.
Pero así como el resto de las marcas participantes, afronta el hecho de que esta tecnología y la arquitectura de los prototipos son nuevas, lo cual dificulta saber cómo se desarrollará en las “24 Horas de Daytona”.
La administración de partes limitadas, las fallas normales de confiabilidad en todas las áreas y los problemas de cadenas de suministro, que se acentúan más porque todos tuvieron que hacer un paro breve por las fiestas de Fin de Año, generan dudas sobre las expectativas para este fin de semana.
“La clave es correr el auto ahora mismo, para encontrar lo que aún no sabemos; sin lugar a dudas compromete las cuestiones de puesta a punto del chasis. Quizá estaremos en un perfil bajo, asegurándonos de que el auto llegue al final”, comentó Salters.
“24 horas es el Everest del deporte motor. Debemos tomar aire para llegar a la cima, no importa cuántas veces lo hagas, es demandante, pero con cada parte nueva del auto, la atención va para atravesar las 24 horas”.
Acura y Honda/HPD planean correr únicamente en IMSA en el corto plazo con el ARX-06. Meyer Shank Racing y Wayne Taylor Racing son sus equipos oficiales.