Para el Gran Premio de Azerbaiyán, se hizo un ajuste en el procedimiento de reinicios tras banderas rojas que podría ser permanente en F1.
Hubo tres suspensiones de competencia hace cuatro semanas en Australia, aunque varios pilotos argumentaron que el parte del accidente que se generó tras el segundo relanzamiento – hecho del mismo método que en un inicio de Gran Premio – se debió a que, por la velocidad del Auto de Seguridad, no lograron colocar los neumáticos a temperatura mientras se dirigían de la zona de fosos a la parrilla.
Por ello, en la junta de pilotos del viernes en Bakú, se decidió darle más control al grupo en este escenario: cuando la condición pase de bandera roja a amarilla, las luces del Auto de Seguridad se apagarán inmediatamente, y cuando el contingente abandone la línea de fosos 30 segundos después del vehículo, el líder de la carrera dictará el ritmo y, por ende, la capacidad para calentar sus neumáticos.
Hasta ahora es una medida temporal y posteriormente se discutirá si esta medida se vuelve permanente, aunque los pilotos estuvieron de acuerdo con su implementación.