Sergio «Checo» Pérez tomó el mando del RB18 de Red Bull Racing en el circuito de Montmeló en Barcelona, siendo séptimo en su primera aparición en la pretemporada 2022 de F1.
El piloto Telcel-Infinitum-Claro completó 38 giros durante la mañana de la segunda jornada de ensayos, dejando su mejor tiempo en 1m22.562s.; sin embargo, una falla en la caja de cambios a 20 minutos del almuerzo obligó al mexicano a detenerse en la Curva 13, generando la primera de dos banderas rojas que aparecieron en la tanda de ocho horas.
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Pérez volvió a la acción por la tarde para completar una distancia superior a la de una carrera. Importante, porque ya han llegado un par de cajas de Milton Keynes con piezas nuevas para probar. El mexicano terminó séptimo en la clasificación general, con un registro de 1m21.430s y 78 vueltas.
«Aprendimos muy bien hoy y estoy satisfecho con eso», declaró. «Estamos probando cosas muy diferentes y tenemos mucha información para trabajar, así que creo que en las reuniones es importante profundizar y dar a los ingenieros la mayor cantidad de comentarios posibles».
«El problema con la caja de cambios tardó un poco más en solucionarse de lo que esperábamos, pero está bien, se espera que estas cosas sucedan en las pruebas. Estaré de regreso en el auto mañana y espero que el clima se mantenga seco».
Aunque Red Bull fue el equipo con la menor cantidad de giros acumulados en este jueves, el combinado de dos días (225) coloca a la casa de Milton Keynes los coloca en un rango similar al de rivales potenciales como Mercedes (233) y McLaren (229). Hasta ahora, Ferrari encabeza este departamento con 303 vueltas.
Además, el desempeño y comportamiento del monoplaza nuevo tiene satisfechos a Pérez y a Max Verstappen, siendo un indicativo de que el desarrollo ha ido en una dirección alentadora.
“Checo se puso en ritmo bastante rápido esta mañana y sus comentarios son prácticamente los mismos que los de Max, lo que significa que sabemos a dónde vamos y todo está bastante arreglado», explicó Guillaume Rocquelin, jefe de ingeniería de carrera.
«Cada vez que el auto vuelve al garaje hacemos cambios y afinamos la dirección, así que, en general, estoy contento. Tuvimos un problema pequeño hoy, lo que significó que perdimos alrededor de medio día de funcionamiento, pero no estamos particularmente preocupados por el problema en sí, es solo un dolor que perdimos ese tiempo».
«Sin embargo, no debería afectar las cosas a largo plazo, ya que tenemos una plataforma sólida y estamos contentos con el progreso que estamos logrando».
Mañana, en el tercer y último día de esta primera ronda de pretemporada, Max y Checo estarán de vuelta en la pista, con el holandés manejando por la mañana y el tapatío, por la tarde.