Desde la ‘amenaza del título’ cuando debutó en la categoría de Moto3 en 2015, hasta el Campeonato del Mundo de MotoGP en 2021, Fabio Quartararo es un talento notable con una historia de éxito inspiradora.
En su primer año con el equipo oficial japonés, el centauro francés mostró velocidad, madurez y perseverancia heroica increíbles para asegurar el título en la clase estelar de la categoría con dos rondas de anticipación.
Quartararo ya era un nombre muy seguido al comienzo de su carrera en MotoGP. Debutó en Moto3 en 2015 con tan sólo 15 años de edad, momento en el que se había derogado la regla que prohibía la participación a menores de 16 años.
Siendo Campeón del CEV Moto3 Junior en 2013 y 2014, ya se le consideraba una amenaza desde el principio. Como muchos pronosticaban, subió al podio en su segunda aparición, en el Circuito de las Américas. Repitió esta hazaña en Assen después de conseguir la PP tanto en Jerez como en Le Mans.
Una lesión en el tobillo al final de la temporada detuvo su progreso, pero aún así terminó la temporada en décimo lugar general. Fue la primera señal de una carrera en auge, aunque no siempre fue un camino fácil.
Ocupó el 13º puesto en 2016 con Leopard Racing en Moto3 y repitió este ranqueo en 2017 con HP40 en Moto2, de nuevo sin podios, pero su ritmo impresionante durante su año de estreno en la división intermedia le permitió pasar a Speed Up Racing para su segunda campaña.
Fue en 2018 cuando hizo avances grandes. Consiguió su primera PP en la clase intermedia y su primera victoria en Barcelona, a lo que le siguió un segundo sitio en Assen y su ubicación entre los diez mejores en la clasificación final.
En agosto de 2018, se anunció que Quartararo se uniría a Franco Morbidelli en el recién creado equipo satélite de Yamaha, Petronas Yamaha SRT, a partir 2019. Un gran desafío, pero el francés estaba listo para ello.
Lo que siguió en 2019 fue nada menos que notable. El Diablo quería mostrar a los que dudaban de él de lo que era realmente capaz y silenció a los detractores al conseguir siete podios y seis PPs. También concluyó como Novato del Año, ganando el titulo de Pilotos Independientes y siendo quinto en el Mundial.
Aún faltaba su victoria elusiva en la categoría reina, que se convirtió en su objetivo clave para 2020. A pesar de los cambios de calendario debido a la pandemia de COVID-19, no tuvo que esperar mucho, ya que dominó en Jerez en julio para abrir su campaña con una victoria doble.
En Catalunya anotó su tercer triunfo, pero luchó por mantener el mismo rendimiento hasta el final de la temporada; sin embargo, en 14 GPs consiguió nueve arranques en primera fila, cuatro de las cuales fueron PP, pero tuvo tal irregularidad que se conformó con la octava plaza general.
En 2021, Quartararo cumplió dos de sus sueños en un mismo año: seguir los pasos de su ídolo Valentino Rossi al unirse a la escuadra oficial de Yamaha MotoGP y convertirse en Campeón del Mundo de MotoGP, y lo segundo lo hizo casi fácilmente.
Quartararo ya se había establecido como un talento increíble, por lo que naturalmente las expectativas eran altas. Mientras el equipo intentaba no presionarlo, el joven francés no pudo evitar sentirse un poco nervioso en la primera ronda, en la cual ocupó la quinta posición. En la segunda carrera en Doha, pese a que no partió en primera fila, logró su primera victoria.
Fabio demostró que su logro no fue una casualidad al ganar la siguiente prueba en Portimão, y podría haber ganado también en Jerez de no ser por un síndrome del compartimiento del esfuerzo crónico repentino que lo relegó a 13º, su resultado más bajo de toda la temporada.
Este problema se resolvió rápidamente mediante una cirugía, y apenas una semana después estaba celebrando un tercer lugar, después de haber superado las condiciones de lluvia en Le Mans. Dos semanas más tarde volvió a lo más alto en Mugello y llegó tercero en Montmeló, aunque dos sanciones lo relegaron a sexto.
La tercera plaza en Sachsenring y otra victoria en Assen lo consolidaron como líder general en el receso de verano, tras el cual fue tercero y séptimo en la fecha doble en Austria; para ese momento, su liderato general era de 47 unidades.
Otra victoria importante en Silverstone extendió su ventaja a 65 puntos, por lo que a partir de ahí, comenzó a dosificar su liderato. Tras culminar octavo en Aragón y segundo en la primera visita a Misano, lo encaminaron a hacer una estrategia más conservadora para el Circuito de las Américas (COTA).
Un pilotaje maduro, balanceándose en una delgada línea entre defender el segundo lugar y perseguir al líder de la carrera. lo premió al extender su margen en la clasificación a 52 unidades en el proceso, dándole su primer «Match Point» para la segunda carrera en Misano, donde comenzó en 15º mientras su rival por el título lo hacía desde la PP.
Pero Quartararo remontó mientras Francesco Bagnaia abandonó en las últimas vueltas; la cuarta casilla fue suficiente para sellar el título de campeón.
It’s safe to say Yamaha won’t forget 2021 for a long time! 🏆
Not just because of their success but also for all the twists and turns along the way! 🤯#MotoGP pic.twitter.com/wzGObNaLUC
— MotoGP™🏁 (@MotoGP) December 29, 2021
Ganar el Mundial de MotoGP en su año de debut con Yamaha fue un sueño hecho realidad para Quartararo. Logró su objetivo de toda la vida, pero pinta para ser el comienzo de su asociación que ya es exitosa, al haber conseguido cinco victorias, 10 podios, 14 arranques en primera fila, cinco PPs y cinco vueltas rápidas.
La estrategia vieja de «velocidad y consistencia» fue la clave del éxito, pero lo que permitió a Quartararo seguir los pasos de su ídolo Rossi fue un «ingrediente secreto»: mantener una concentración incansable, mostrar determinación y entregar actuaciones consistentes en sumar puntos incluso en sus «días malos».
