En todos los aspectos de la vida siempre hay, cuando menos, un par de opiniones o lados. El automovilismo clásico mexicano no podía ser la excepción y las opiniones divididas eran (y siguen siendo) en este caso Los Rodriguistas y Los Solanistas.
Nuestro Editor en Jefe, Carlos Eduardo Jalife Villalón, razona que en lo personal aprendió a enorgullecerse con las victorias de ambos bandos pues eran mexicanos y no había tantos pilotos como para pensar en un enfrentamiento. Eran Rodríguez y Solana contra el mundo de apellidos Clark, Hill, Donohue, Ickx, Regazzoni, Rindt, Siffert pero en México siempre se discutió acerca de quién era el mejor si Pedro o Moisés (sin dejar de lado a Ricardo, pero no compitió directamente en F1 con ellos, por lo que no hay comparación posible).
Pedro y Moisés se enfrentaron siete veces en la máxima categoría, seis de ellas en México y una en el Gran Premio de EUA en Watkins Glen. Pedro sacó 7 puntos de cuatro clasificaciones (dos sextos, un quinto y un cuarto) en esas carreras y Moisés no puntuó. Ninguno tuvo Vuelta Rápida o posición de cuerda en la arrancada y no hubo podios que celebrar, pero Moisés arrancó adelante de Pedro en 4 de las 7 carreras. Analicemos cada una de ellas:
1963: II GP de México, pero primero en contar para el Campeonato Mundial. Pedro consigue el tercer auto del equipo de Colin Chapman, el famoso Lotus 25, primer monocasco en aparecer en la F1. Moisés obtiene el auto del equipo privado italiano Scuderia Centro Sud, un BRM P57 con los cuales Graham Hill había conquistado el campeonato en 1962, pero estaban ya un poco anticuados.
El motor del Lotus era un Climax V8 de 200 caballos mientras el BRM usaba un V8 propio con una potencia similar. Todo mundo preferiría el Lotus, pero Chapman lo dejaba usar solamente cuando Clark ya tenía un buen tiempo y había decidido qué chasis iba a correr, lo cual reducía mucho el tiempo de práctica asignado a Pedro, mientras Moisés tuvo las sesiones completas, aunque influyó que lloviera el sábado y los tiempos del viernes no fueran mejorados.
También al ser un tercer auto, la atención dada al mismo era exigua, siempre tenía prioridad Clark, que había ganado cinco veces y era campeón mundial. Moisés califica undécimo adelante de Brabham, Taylor, y Maggs, al marcar 2’04.1” y Pedro fue penúltimo con 2’15.3” pues tuvo problemas con la mezcla de combustible.
En la carrera Pedro hace una de sus grandes arrancadas y pasa la primera vuelta en noveno mientras Moisés va justo detrás. Luego Pedro sube al octavo sitio presionando a Bandini pero termina retirándose en la vuelta 26 por rotura de la suspensión trasera (lo cual recuerda el accidente de Ricardo en 1962) y Moisés toma su lugar. Moisés sube al sexto sitio con el abandono de McLaren y Bandini, pero Bonnier lo rebasa y lo deja séptimo que es la posición que ocupa cuando en la vuelta 57 se retira por problemas de motor, es clasificado en el sitio 11.
1964: Pedro usa un Ferrari y Moisés tiene ahora el tercer auto del equipo Lotus, un tipo 33. En esta carrera se decidiría el campeonato mundial entre Graham Hill (BRM), Jim Clark (Lotus) y John Surtees (Ferrari) así que ambos mexicanos sufrieron que sus equipos estaban centrados en sus primeros volantes. Moisés tiene más tiempo de práctica pues Clark corre su usual auto, pero Pedro sufre los pretextos de Eugenio Dragoni, jefe de Ferrari, quien no le suelta el auto hasta que John decide que va a correr el 158 lo que le deja el 1512 a Bandini y el muletto 156 libre para Pedro, quien hace un tiempazo de 2 minutos y 90 centésimas para obtener el noveno puesto, pero Moisés solamente alcanza el 14° marcando 2’01.43” pues la carburación no queda.
En la carrera, Clark salió en punta y al término de la primera vuelta de 5 kilómetros, de 65, tenía un par de segundos sobre Gurney. Pedro iba séptimo y Moisés decimocuarto justo atrás de Surtees. Pedro pasó a Spence en la vuelta 29 cuando el inglés se trompeó y en la 31 Bandini se acercó demasiado a Hill y lo empujó contra el riel a la vez que se trompeaba. Hill paró a revisar el auto y regresó en el lugar 13 a la pista. Pedro iba sexto, pero Brabham se empezó a quedar con problemas de encendido y Spence pasó a Pedro y ambos al australiano con lo cual Ferrari iba 3-4-6.
Moisés circulaba undécimo, conservador, pues los problemas de carburación hacían que de repente el auto tuviera toda la potencia y a ratos no. Pedro acabó sexto, su primer punto en F1 y Moisés quedó contento de su décimo lugar, a dos vueltas del ganador.
1965: Este es el único año en que se enfrentan dos veces. En Watkins Glen, Pedro usa un Ferrari 1512. Hay otros 19 autos inscritos y entre ellos está Moisés Solana en el tercer Lotus oficial, un tipo 25 con motor Climax viejo de 2 válvulas por cilindro. En las prácticas tanto Pedro como Moisés andan un par de segundos arriba de los mejores tiempos. Pedro, con problemas de potencia, es el lugar 17 con 1’13” y queda junto a Attwood que marca 1’13.7” igual que Moisés pero más temprano en la sesión por lo que el otro mexicano queda en el sitio 19 sólo adelante de Ireland.
El domingo, al caer el banderazo, Hill le gana el arrancón a Clark. La carrera es a 110 vueltas y antes de la 8 empieza a caer la lluvia. Pedro, sale bien y aprovecha para meterse a la pelea con Rindt por el quinto, que es suyo cuando el austríaco no aguanta la presión y se sale frente a los fosos. Moisés, con muchos problemas no resueltos en los entrenamientos corre a velocidad reducida.
Pedro sufre cuando la pista se empieza a secar, pero Ginther y Bonnier van muy lejos y no lo inquietan. Moisés corre muy atrás, para varias veces en los fosos y pierde más de 10 vueltas, aunque todavía va adelante de Bucknum.
La carrera es para Hill que pondrá la VR en la 105 por si hay dudas, pero en los fosos de Ferrari se dan cuenta que Rindt tiene problemas de cambios y le ponen la señal de atacar a Pedro quien empieza a acortar distancia y a seis vueltas del final pasa al Cooper apoderándose del quinto sitio e inclusive llega a acercarse a Bandini. Moisés es duodécimo a 15 vueltas, pero delante de Bucknum, quien sólo completa 92.
En la Magdalena Mixiuhca, con Ferrari Pedro tiene un 158 que lleva la franja blanquiazul del NART y probará las Firestone que Ferrari quiere para 1966. Moisés corre nuevamente el Lotus 25 reserva. Pedro empieza a probar las llantas estadounidenses y consigue bajar de los dos minutos marcando 1’59.06, pero en las Eses el auto se le va y al golpear contra el riel pierde una rueda.
Moisés tiene algunos problemas pero supera el tiempo de Pedro y queda cerca de Spence, en un auto más nuevo. El sábado Pedro, cuyo auto sigue en reparación, pide la oportunidad de probar el 1512 y en unas cuantas vueltas iguala su registro, pero queda en el lugar 14. Moisés baja a 1’57.55” para el noveno sitio.
El domingo, Dragoni dice que Scarfiotti tiene mejor tiempo y debe correr pero don Pedro Rodríguez, papá de los hermanos, lo persuade y Pedro correrá, mientras Scarfiotti verá la carrera en los fosos. Los organizadores han alterado la parrilla por la ausencia de Scarfiotti y tanto Pedro como los que le siguen son colocados un lugar adelante, Pedro en el sitio 13 de los 17 participantes.
Al darse el banderazo de salida Ginther aprovecha que Clark sale lento para pasarlo y colocarse al frente del pelotón mientras Pedro va octavo. Brabham para en los fosos con lo que Pedro se pone a la sombra de Bandini y Siffert se les une para batallar por el sexto. Para la vuelta 12 Stewart apenas puede mantenerse al frente de Bandini y Pedro que no parecen coequiperos por lo encarnizado de su lucha y Moisés corre un par de sitios atrás alcanzando al suizo.
En la vuelta 14, Pedro pasa a Lorenzo, pero el duelo sigue y se pasan y repasan varias veces. La presión hace mella en el italiano que se trompea y toca una de las medias llantas que marcan el borde de la pista y para en los fosos.
El auto de Pedro empieza a fallar y entra a ver quÈ tiene. Mientras unos mecánicos cambian la nariz del de Bandini otros descubren un rectificador defectuoso en el de Pedro y lo cambian. Los dos han perdido tres vueltas y ocupan los lugares 13 y 14. Moisés ha subido al sexto sitio al rebasar a Stewart y presiona a Siffert disputándole el quinto sitio el cual consigue en la vuelta 49 ante el júbilo en las tribunas.
Sin embargo pasan siete vueltas y Moisés, tiene que retirarse con problemas de encendido y la gente le tributa una ovación cuando se detiene en los fosos. Pedro alcanza a Lorenzo al completar la vuelta 61 y termina a tres vueltas obteniendo el séptimo sitio.
1966: Para el V GP de México hay 19 autos inscritos. Cooper ha rentado su auto de repuesto, un T81 con motor Maserati de 3 litros a Moisés, mientras Pedro usará un Lotus 33 con motor 2 litros Climax, el tercer auto del equipo. Moisés tiene tiempos decentes, por abajo de los 2 minutos, pero su auto sufre de problemas de inyección. Pedro anda mejor con su auto de menos cilindrada y marca 1’54.78” para el octavo y Moisés hace 1’57.44” para el lugar 16.
La carrera está programada para las 14:30 horas, y en el arranque Ginther, en su Honda, se abre para rebasar a todos llegando a la Espiral en primer sitio, pero tanto Surtees como Clark han dudado y Rindt toma el segundo, seguido por los dos Brabham, Surtees, los dos escoceses y Pedro completando el primer grupo; éste se ve demasiado optimista al tratar de frenar más adentro que Stewart en la Horquilla y tiene que trompear el auto para evitar estrellarlo con la barrera y en el proceso pierde un par de sitios ante Bucknum y Siffert.
Para el giro 10, Moisés ya está en los fosos con el T81 sobrecalentado y abandona, pero Pedro ha recuperado el sexto sitio y persigue a Hulme y a Stewart, que pelean el cuarto, y los pasa ante el delirio de la gente.
Luego va tras Rindt y poco antes de la mitad de la carrera éste tiene problemas cuando la suspensión delantera se rompe y Pedro hereda el tercer sitio, el mejor de un mexicano en México hasta el momento y lo logra compitiendo con un auto con un litro menos de cilindrada. Pasan dos tercios de la carrera y Pedro está solo en tercer lugar, pero en la vuelta 49 se rompe el piñón y la cremallera del Lotus 33 y es obligado a retirarse ante la decepción del público.
1967: Ahora Pedro corre un Cooper Maserati T81 de 3 litros oficial y es el piloto número uno, pues Rindt ha sido un fracaso ese año y Moisés corre el tercer Lotus 49 del equipo oficial, supuestamente un mejor auto. Había 19 autos inscritos y Pedro apenas regresaba a las pistas a dos meses de su accidente en Sicilia por el cual le habían pronosticado cuando menos 6 meses de recuperación. Moisés terminó con el noveno mejor tiempo adelante de Siffert y en el lugar 13 quedó Pedro con 1’52.85.
El domingo a la hora del banderazo Amon y Hill se fueron a la punta. Clark salió en su persecución y Brabham hizo una arrancada buena, pero Hulme no y Moisés lo pasó por la parte interna al llegar a la Espiral y le quitó el quinto sitio. Pedro iba noveno después de haber pasado a Siffert y los BRM en otra buena arrancada. Para la vuelta 12 Clark ya estaba en la punta y Hulme finalmente pasaba a Moisés, quien se detendría una vuelta después con la suspensión delantera colapsada.
A media carrera Pedro ya había sido lapeado por el escocés y aprovechó el retiro de McLaren para irse al sexto sitio ante el asombro de los conocedores. Al terminar la prueba Pedro paró en los fosos y después de un par de minutos en los cuales le dieron algo de beber y lentamente se quitó el casco, tuvieron que ayudarle a salir del auto pues estaba extenuado por el esfuerzo y el dolor en su pie, pero contento pues había conseguido un punto que lo dejó sexto en el campeonato.
1968: Pedro vuelve a correr para un equipo oficial, como primer piloto de BRM y Lotus le había dado su tercer 49B con alerones altos a Moisés. Había 22 pilotos inscritos y Moisés marca 1’47.67” para el sexto tiempo y Pedro termina con el undécimo, 1’49.74”.
El sábado Moisés no quiere usar el auto sin alerones y amenaza con no correr pero Chapman le promete evaluar la situación. Siffert califica primero en su Lotus 49B privado del equipo de Rob Walker y en la sexta fila quedan los dos mexicanos, Moisés con su tiempo del viernes y Pedro se queda a 13 centésimas y decide usar el motor del BRM P138 en el chasis del P133.
El domingo Moisés ha arreglado el problema con Chapman y usará el chasis R2, mientras Oliver usa el R5 por ser el más lento de los tres pilotos de Lotus. Hill atento al banderazo hace una excelente salida y pasa a Siffert y Amon, Surtees se va atrás de Hill y Stewart se coloca tercero. Pedro se pone sexto atrás de Amon y Hulme, con Rindt y Siffert pisándole los talones pero Moisés se retrasa y el auto parece desbalanceado y para en la tercera vuelta a quitar el ala trasera que se ha caído en su Lotus, regresando a pelear el último sitio.
Pedro va octavo con el motor de su auto acusando alguna falla, pero aprieta para emparejar a Oliver y pelearán toda la carrera hasta que su lucha se vuelve por el tercer sitio. En la penúltima vuelta Oliver pasa a Pedro antes de la Peraltada y Pedro lo vuelve a pasar en la vuelta final en la Espiral, pero en la siguiente recta Oliver retoma la vara alta en su duelo y conserva el sitio hasta la meta. Hill es campeón mundial y Pedro consigue el mejor resultado de un mexicano en México, cuarto.
¿Qué resultado sacamos de estos datos? Pedro tiene más puntos, pero Moisés le ganó a calificar 4-3, pero Pedro calificó en 1967 con la pierna rota, pero Moisés usó un BRM viejo en 1963 y aún así supero a Pedro. Éste quedó cuarto con un BRM P133 en 1968 y Moisés abandonó con un Lotus 49B que era el mejor auto de su generación y tenía el motor Cosworth en exclusiva… y así nos podemos pasar días discutiendo los méritos relativos de cada uno.
Tan bueno uno como el otro, pero creo que lo que engrandece más a Pedro en esta comparación es que Moisés no tenía que pasar cada vuelta que daba en el Autódromo (que ahora lleva el nombre de ‘Hermanos Rodríguez’) y ver el lugar en el que se mató su hermano. Pasar por la Peraltada cada vez era una victoria para Pedro y esa no se refleja en estadística alguna.
PEDRO RODRÍGUEZ (1940-1971)
El mejor piloto mexicano de la historia murió en una carrera de Interserie (Grupo 7) en un Ferrari 512M prestado en el circuito callejero de Nuremberg, Alemania. Al auto se le rompió la masa delantera derecha al frenar para la Ese del circuito y lo mandó contra una balaustrada y terminó incendiado en el riel, pero Pedro sufrió fractura mortal de la base del cráneo en el impacto.
Pedro estableció un récord que nunca fue igualado:
• Circuito Le Mans (1971) 3m13.9s Porsche 917LH
También es el único en ganar en Daytona en sus tres formatos:
• 3 Horas (1963), Continental 2000K (1964) y 24 Horas (1970 y 1971)
Entre sus hazañas están:
• Ganar las 24 Horas de Daytona (1970) corriendo 19 horas al volante
• Ganar los 1000 Km de Austria (1971) corriendo 930 km al volante
• Obtener un triunfo de F1 antes de 10 carreras totales (novena en 1967)
En su palmarés está también:
• Único mexicano en ganar en la F1 (Sudáfrica 1967) y Béigica (1970)
• Primer mexicano en tener una Vuelta Rápida en F1 (Francia 1968)
• Único mexicano en ganar las 24 Horas de
Le Mans (1968)
• Campeón Mundial de Resistencia (Marcas) 1960, 1961, 1962, 1963, 1964, 1965, 1968, 1970 y 1971
• Campeón Mundial de Resistencia (Pilotos)
1970 y 1971
• Primer mexicano en correr en la serie premier de NASCAR (1959)
• Único mexicano ganador en el Campeonato Estadounidense de Carreras de Circuito –
USRRC (Grupo 7)
Y su manejo en la lluvia lo coloca quizás como el más grande de la historia en esas condiciones. Cuando Ayrton Senna ganó su primera carrera en la lluvia, le dijeron: “Tu podrías ser el próximo Pedro Rodríguez”.
MOISÉS SOLANA (1935-1969)
El destacado piloto-pelotari murió en su McLaren Grupo 7 en la disputa del Hill Climb Valle de Bravo-Bosencheve el 27 de julio de 1969, al entrar pasado a una curva y tocar una guarnición de concreto en la salida cuando ya aceleraba en subida. Su auto voló por los aires y cayó ruedas al aire en el terreno boscoso y se incendió con Moisés, quien falleció en el impacto, sepultado debajo.
Entre sus récords que nunca fueron rotos están:
• Carretera Federal México Puebla (1967) 38m04s Lola T70
• Carretera Federal México Cuernavaca (1967) 20m03s Lola T70
• Carretera Federal México Toluca (1969) 15m15s McLaren M6B
Al momento de morir también ostentaba el récord absoluto en el circuito capitalino, por encima de los F1
• Aut. Magdalena Mixiuhca (hoy Hnos Rgz.) 1m47.0s McLaren M6B
Internacionalmente, Moisés corrió la V Carrera Panamericana en 1954, a los 19 años, terminando sexto en clase por encima de Piero Taruffi, ganador de una edición anterior de la clásica de carretera.
Moisés fue también ganador en el Campeonato Norteamericano de Carreras de Circuito – NARRC (Grupo 7) en 1968 en México y sus triunfos en pistas nacionales fueron más de 200.
En Fórmula Uno disputó ocho grandes premios, pero nunca obtuvo puntos.