El Dr. Robert Hubbard, la mente detrás de la creación del Dispositivo de Apoyo de Cabeza y Cuello (HANS, por sus siglas en inglés), falleció este martes a la edad de 75 años.
Quien fuera profesor de Ciencias de Materiales y Mecánica en la Universidad Estatal de Michigan desarrolló este sistema, en colaboración con su cuñado y ex piloto de IMSA/Grand Am, Jim Downing, durante los años 80 y 90, revolucionando las medidas de seguridad en todas las categorías de automovilismo a nivel mundial.
«El invento de Bob cambió verdaderamente al mundo de la seguridad en las carreras de autos y era una persona amable que podría ayudar a cualquiera con necesidad. Será extrañado grandiosamente», indica un enunciado que se publicó en el sitio oficial de HANS Performance Products.
Teniendo sus inicios en tecnologías de seguridad vial, el Dr. Hubbard completó un doctorado sobre propiedades mecánicas de los huesos del cráneo en el Instituto de Investigación de Seguridad en Carreteras de la Universidad de Michigan, y en los años 70 trabajó para General Motors; en ambos casos, su área de interés fue la investigación de las lesiones en accidentes de automóvil.
De ahí, junto con los accidentes fatales de amigos cercanos en competencias, nació la idea de diseñar el dispositivo, que tiene forma de collar y se coloca en los hombros, cuyo objetivo es proteger a los pilotos de fracturas basilares de cráneo, los cuales se producen en los impactos frontales y laterales, y que derivan en la desaceleración brusca de los cuerpos.
El prototipo Modelo 1 del sistema HANS debutó en la final de la serie IMSA de 1986, a lo que le siguió un desarrollo prolongado en la Universidad Estatal de Wayne, en Detroit; para 1991, se vendió su primer ejemplar de producción, pero fue a raíz de los accidentes de Ayrton Senna y Roland Ratzenberger que la Fórmula 1, mediante el Prof. Sid Watkins y Mercedes-Benz, comenzó a interesarse en este proyecto.
Las muertes de Gonzalo Rodríguez y Dale Earnhardt I, entre muchos otros, derivaron en que la CART/IndyCar y la NASCAR hicieran obligatorio el uso del dispositivo HANS en 2000 y 2005, respectivamente. La Categoría Máxima hizo lo propio en 2003.
Actualmente, el sistema se usa en todo tipo de eventos, sean regionales o nacionales, en autos fórmula, de producción, midgets, deportivos y de off-road. En 2009, se vendió el ejemplar No. 100,000 y, aún se han generado muertes en competencias, su uso ha ayudado a disminuir los riesgos.
Junto con la barrera suave de reducción de energía («SAFER», por sus siglas), se consideran los elementos más importantes en la seguridad del último medio siglo.