Un ritmo muy bueno es el que ha mostrado Santiago Creel en las jornadas del Rally Dakar de domingo y lunes, luego de reintegrarse a la caravana tras el día de descanso.
El mexicano ha sido constante y ha terminado ambos días dentro de los primeros 50 en la clasificación general, y está ubicado en el tercer puesto de la categoría SXS en el semimaratón, exclusiva para los que tuvieron que abandonar la semana anterior, pero tuvieron la oportunidad de reincorporarse al evento.
Aunque los problemas también han aparecido para el mexicano y su copiloto polaco, han podido resolverlos de la mejor forma posible y han perdido el menor tiempo posible al tener que cambiar un neumático, así como una banda del motor.
“Este lunes ha sido una etapa muy complicada, muy técnica, con mucha navegación ya que es muy fácil perderse. Había mucha duna, mucho fesh-fesh que es arena muy fina, como talco, en donde se puede hundir el auto, y además había también muchas piedras», comentó.
Y es que el rudísimo terreno en el que se desarrolla el Dakar ha estado lleno de dunas y de fesh-fesh, ese polvo que es similar al talco y que hace que el andar por estos caminos sea de verdad muy complicado. Esto simplemente ha motivado a Creel que ha podido sacar adelante el Polaris RZR 1000 Turbo sin más eventualidades.
«En general fue una buena etapa a pesar de tener algunos contratiempos», afirmó. «Tuvimos una llanta ponchada y una banda del motor que se tuvo que cambiar. Eso nos hizo perder casi 40 minutos, pero en general fue una buena etapa y nos posicionamos ahora en tercer lugar del semimaratón dentro de nuestra categoría».
Mañana martes, el mexicano partirá de San Juan rumbo a Pisco, en la octava etapa del Dakar que incluirán 575 kilómetros de recorrido, 360 de ellos en etapas especiales.