Primero fue Francia, luego Alemania y ahora es Italia. Hay temor acerca de que Monza pudiera perder su sitio en el calendario de Fórmula Uno tras un comentario del zar de la categoría, Bernie Ecclestone, acerca de las negociaciones con el circuito italiano en las que los peninsulares parecen negarse a pagar el precio que el británico pide por renovar el contrato que espira este año.
El jefe octogenario de la F1 comentó: “Tendremos que esperar y ver qué pasa. Ellos no tienen un acuerdo. (Es) un poco como Alemania”. Cuando se le sugirió que la F1 sin Monza –que ha tenido un GP cada año desde 1950, excepto en 1980 cuando la fecha italiana se corrió en Imola– es impensable, el ejecutivo de FOM no se inmutó: “Les diré algo, de hecho me dijeron eso mismo cuando dejamos de tener una carrera en Francia… y en Alemania”. Traducción, ningún circuito clásico está a salvo de la codicia de Ecclestone y su grupo.
