Button manda en Melbourne y muestra que McLaren es suyo.
Mucho se especuló al final de la campaña pasada sobre Jenson Button ‘robándole’ el equipo McLaren a Lewis Hamilton, quien se hizo en Woking y siempre fue su hijo consentido. En 2012, con un triunfo dominante, controlando la carrera desde la punta, el rumor se confirmó: Jenson manda en McLaren.
En la primera práctica el campeón 2008 fue superado por el campeón 2009, y terminaron la prueba con los mejores tiempos, seguidos por Michael Schumacher.
Los Hispania, siendo terminados en los fosos, no pusieron tiempo y todo se les complicó cuando en la Práctica 2 llovió. Los equipos aprovecharon para probar las Pirelli mixtas y de lluvia, lo cual no habían hecho en la pretemporada. La sesión se puso mejor hacia el final con la pista secándose y Schumacher quedó al frente.
Para el sábado en la mañana, Lewis Hamilton empezó a sacar su velocidad y superó las marcas del día anterior por más de dos segundos, aunque lejos de los registros de 2010.
La falta del difusor soplado le quitaba agarre en la parte de atrás a los autos y los despistes estuvieron al la orden del día; los autos se notaban sueltos de atrás y el Ferrari era de los más emproblemados, como lo demostraron los sustos varios que se llevaron sus pilotos.
En la calificación empezaron las sorpresas. Kimi se equivocó en su vuelta rápida y el equipo calculó mal el tiempo dejándolo sin oportunidad, eliminado en la Q3 juntos con los seis autos de los equipos más nuevos, pero los Hispania lejos del 107%, por lo cual quedaron eliminados.
En la Q2 los Mercedes brincaron al frente, pero Pérez tuvo problemas en la caja y no puso tiempo, con lo que quedó en el sitio 17, que se convirtió en el 22 cuando el equipo decidió cambiarle la caja al Sauber C31.
Alonso se despisto y quedó atrapado en la trampa de arena; Massa nunca se vio en ritmo y ambos Ferraris fueron eliminados. Vino la Q3 y Lews hizo una gran vuelta –único en romper 85 segundos– y nadie se le acercó, especialmente los favoritos previos, pues el RB8 de Webber se quedó sin KERS y Vettel se pasó en una frenada y perdió el trazo con lo que llenaron la tercera fila ambos.
Button fue el que más se acercó a décima y media, pero la sorpresa fue Romain Grosjean, tercero en el Lotus, delante de Schumacher. Rosberg puso el otro Mercedes en séptimo y lo acompañó ´Pastor Maldonado en la cuarta fila, en el Williams que no había calificado tan adelante en todo 2011.
Las incógnitas empezaban a despejarse y en McLaren todo eran sonrisas pues por primera vez acaparaban la primera fila de salida desde que Lewis y Jenson son coequiperos.
El domingo amaneció nublado, pero aclaró al mediodía y los pilotos pasaron el tiempo planeando sus estrategias de carrera. Pirelli consideraba casi imposible hacer una carrera de una detención ya que el compuesto mediano duraba unas 25 vueltas máximo y el suave apenas 20 y pronosticaba dos detenciones por la poca diferencia, medio segundo, entre compuestos.
Los 22 autos completaron la vuelta de formación y Charlie Whiting tardó en poner las luces rojas. Cuando se apagaron Lewis no hizo una buena salida, al igual que los primeros de la línea externa, Grosjean y Webber. Button traccionó mejor y de atrás se les unieron los dos Mercedes y Vettel. Al llegar a la primera curva.
Sergio Pérez ya había pasado a seis, pero el camino se apretó y se tocaron los Toros con Webber, luego Senna se trompeó y los Sauber se dieron; alguien le pegó a Hulkenberg y lo eliminó. Senna y Ricciardo fueron a los fosos a reparaciones, mientras Button se alejaba de Hamilton y Vettel pasaba a Rosberg por el cuarto sitio, Alonso –otra gran arrancada– los presionaba delante de Webber.
Button sabía que tenía que alejarse más de un segundo por la activación del DRS al final de la segunda vuelta y con un par de giros rápidos se puso a salvo.
Maldonado se vio optimista y rebasó a Grosjean, se pasó de frenada y le pegó al galo eliminando al Lotus. Lewis se alejaba de Schumacher, quien era presionado por Vettel. Este se despistó y se formó un tren.
La siguiente baja fue Schumacher, con problemas en la caja y luego a Massa lo abrumaron los Sauber cuando perdió las llantas traseras por desgaste siendo el primero en parar tras 11 giros. Los demás fueron alargando sus paradas, pero nadie como Pérez, quien aguanto hasta la vuelta 24 con sus llantas medias y estaba en los puntos. Tras parar, Lewis no pudo pasarlo rápido y para cuando lo hizo Button estaba 10 segundos adelante y Vettel respiraba en sus escapes.
Así se mantuvieron hasta la 36, cuando a Petrov se le paró el auto frente a los fosos y provocó la salida del insignia, justo cuando los McLaren habían hecho su recambio final. Vettel quedó de líder, se detuvo bajo amarilla y le ganó el sitio a Hamilton. Todos pararon en esas vueltas, excepto Pérez, quien ya estaba en los puntos junto con Kamui.
Al reiniciar, Button volvió a escaparse y Vettel no pudo evitarlo. La carrera estaba decidida pues Jenson controló todos los ataques imponiendo la vuelta rápida en cuanto se le acercaban y así llegó al final.
Lewis no pudo montar un ataque contra Vettel y Webber tampoco se le acercó mucho después de deshacerse de Alonso. Este peleó hasta el fin con Pastor, pero el venezolano tiró todo por la borda con una maniobra tonta que lo mandó a la barda a media vuelta del final.
Sergio venía detrás del venezolano, presionado por Rosberg, y frenó duro, Nico lo tocó y pasaron por los restos del accidente pinchando llantas ambos.
Kamui y Kimi los rebasaron y Sergio aguantó a los Toros y a Di Resta para quedar octavo, aunque se quejó de la maniobra del hijo de Keke. Sus 33 giros con las blandas valieron salvar cuatro puntos y grandes sonrisas en el equipo suizo.
En el podio Jenson y Sebastian eran todo sonrisas, Lewis malencarado. En McLaren hasta los mecánicos de Lewis celebraron ampliamente el triunfo de su nuevo líder: Jenson Button.