La imagen era recurrente en los 80: Ayrton Senna y Alain Prost cruzaban la meta en los primeros lugares, bajaban de su McLaren e iban a abrazar a un sonriente ingeniero.
Se trataba del mexicano Joaquín ‘Jo’ Ramírez, quien se desempeñaba como coordinador de equipo para la escudería inglesa, en la mejor década de la historia de la escuadra.
Jo dejó México a la par de los legendarios Pedro y Ricardo Rodríguez con el objetivo de conquistar Europa. El egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) participó en 479 Grandes Premios, colaboró en 116 victorias que se tradujeron en diez campeonatos mundiales de pilotos y siete de constructores.
Cuando Jo salió de manera activa de Formula 1 su figura mantuvo su un gran renombre y, afortunadamente, su trabajo encontró eco en un puñado de ingenieros mexicanos que decidieron continuar con sus éxitos.
Aunque han pasado muchos ingenieros con el paso de los años, Marcelo Martinelli, Juan Sebastián Navarro y Dalia Ramos, son referentes actuales de la ingeniería tricolor en la categoría.
Martinelli es el más experimentado de ellos y suma ocho títulos mundiales con Mercedes-Benz, luego de una trayectoria que colecciona, hasta el momento, 17 temporadas. Para llegar a la Formula 1, Marcelo pasó por categorías como IndyCar y el Campeonato Le Mans.
Su talento se vio en sus temporadas con el ex-campeón mundial Nico Rosberg, además de que sus compatriotas pudimos verlo en el podio al lado del heptacampeón mundial Lewis Hamilton y de Valtteri Bottas, en el GP de México de 2019 para recibir el trofeo a Constructores.
Y, si Mercedes es uno de los equipos más poderosos de la historia, hay una escudería que es sinónimo de Formula 1: Ferrari. También la casa de Maranello cuenta con un mexicano cuyo trabajo marca la diferencia: Juan Sebastián Navarro.
Jefe Adjunto de Diseño de Compuestos, el nacido en Ciudad de México llegó al equipo en 2014 luego de colaborar con Renault F1 Team, Lotus Renault GP y, previamente, en el Mundial de Rallies de la FIA con el M-Sport. Navarro trabaja directamente en los autos de Charles Leclerc y Carlos Sainz.
Una de las ingenieras que abre brecha en Formula 1 es mexicana, se trata de Dalia Ramos. La originaria de la Ciudad de México se desempeña como la jefa del departamento de Build and Test de Alpine F1 Team, es decir, trabaja con los monoplazas de Esteban Ocon y Pierre Gasly.
Dalia pudo trabajar en el área aeroespacial con Rolls-Royce, tras lo cual tuvo la fortuna de dar el salto a Alpine y hoy es un estandarte de la capacidad de los ingenieros tricolores y, más importante aún, es la nueva cara de la mujer mexicana en el automovilismo profesional.
Ellos estarán de vuelta en casa para el Gran Premio de la Ciudad de México, del 27 al 29 de octubre en el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde confirmarán frente a los suyos que son un elemento clave para conquistar el triunfo. ¡Feliz Día del Ingeniero!