El equipo anglo-suizo, quien se llevó los campeonatos tanto de pilotos como de títulos en la categoría LMP2 el fin de semana pasado en la pista de Bahrein, última del WEC, admitió que se acerca a tomar una decisión sobre regresar a la categoría en la cual dominó desde 2012 hasta 2016, primero con un chasis Lola y después con su propio R-One creado por ORECA.

Bart Hayden, director del equipo, dijo que “hay un apetito en Rebellion por entrar a P1 de nuevo, pero no se ha llegado a una decisión por el momento y dudo que haya algo antes de llegar a mediados de diciembre” aunque admitió que los tiempos serían “bastante justos” para entregar una nueva combinación de chasis y motor.

Preguntándole si Rebellion regresaría con un chasis de Ginetta o BR Engineering (el cual lanzó su BR1 nuevo en Bahrain), Hayden contestóq: “Creo que nos gustaría nuestro propio auto”, aunque parece que su relación con ORECA (la cual no fue afectada por el cambio de Rebellion a LMP2) seguirá igual de fuerte, aunque ORECA no se ha dedicado a poder producir un nuevo LMP1 que esté listo para el inicio de la “súper temporada”