FOTO: Renault F1 Team

El aplauso que Daniel Ricciardo le dio a Robert Kubica en la conferencia de prensa antes del GP australiano ilustró parte de la admiración que el paddock le tiene al polaco, pese a las circunstancias de su regreso a la Fórmula 1.

Cuando se apagaron las luces del semáforo para iniciar el Mundial este domingo, pasaron 3045 días (8 años, 4 meses y 3 días) desde la participación más reciente del polaco en el Gran Circo. Como él lo aseguró, fue mucho tiempo, pero a pesar del viaje, aún no ha reflexionado el impacto de su historia, en especial por el entorno complicado en Williams.

«Sabía que sería un desafío extremadamente difícil para mí estar de vuelta en un deporte tan competitivo y estar en la parrilla, y sabía que sería difícil para Williams, pero no esperaba venir a Australia tan desprevenido», expresó después del fin de semana.

«No desde un punto de vista físico, pero el de la falta de manejo. Para mí, antes de probar, (los de) Barcelona serían los días más importantes de los últimos ocho años como piloto – aunque no como persona, cuando estaba en el hospital y no podía manejar. Como piloto, no ha habido días de pruebas más importantes en mi vida, desde el punto de vista de piloto, como Barcelona».

Y es que los retrasos que la fábrica de Grove sufrió en la pretemporada, junto con la salida de Paddy Lowe del área técnica, perjudicaron el desempeño de Kubica y de su coequipero George Russell a lo largo del fin de semana.

Al estar a cuatro segundos de los líderes en los entrenamientos y ocupar la última fila de salida, la carrera del veterano se vio comprometida cuando se rompió su alerón delantero en el arranque, producto de un contacto con Pierre Gasly. Con tres giros de desventaja, Kubica finalizó en 17° sitio, a tres vueltas de Valtteri Bottas.

Pese a entender que las primeras competencias serán duras, mientras continúa el desarrollo de su FW42, no se lamenta de su situación; en lo personal pesa más su satisfacción de volver a la parrilla después de lo que vivió tras su accidente en 2011, más en una época en la que las críticas sobre su estado físico han estado a su alrededor.

«Por mi limitación, siempre he mostrado más que los otros porque la gente siempre tendrá dudas», declaró. «Lo único que puedo hacer es intentar hacer mi trabajo lo mejor que pueda e intentar dejar todos los Grandes Premios con positivos y negativos».

«Pero de alguna forma, hay una razón por la que estoy aquí, y podría ser que al final del año lamente algo, pero una cosa que no lamentaré es intentarlo».