Juan Pablo Montoya no correrá las “500 Millas de Indianapolis” del mes entrante.

El contexto que rodean al colombiano y a Team Penske, la organización de la que forma parte, impedirán que intente ir por su tercera victoria en el clásico estadounidense, hazaña que logró con dicha escuadra en 2015 y con Chip Ganassi Racing en 2000; de esta forma, sus esfuerzos se concentrarán en seguir desarrollando el programa de Acura en los sports cars y en su debut en las “24 Horas de Le Mans”.

“No estaré corriendo la Indy 500 porque estaré completamente enfocado en colocar al Acura Penske en la Línea de Ganadores en el campeonato de IMSA y mi próximo debut en las 24 Horas de Le Mans”, dijo.

“Seguro la estaré viendo, ya que mis coequiperos irán por una 17° victoria para Roger”.

Después de correr de tiempo completo para Penske en la IndyCar, de 2014 a 2016, Montoya fue reemplazado por el estadounidense Josef Newgarden, quien se proclamó campeón del serial de monoplazas el año pasado.

A pesar de que manejó en el “Brickyard” en las 500 millas de 2017, en una inscripción adicional, el desarrollo del prototipo Acura, junto con el incremento en su operación de NASCAR, han maximizado la capacidad de personal en el equipo de Roger Penske, lo que contribuyó a que su programa en IndyCar pasara de cuatro a tres monoplazas.

Esto también implicó el traspaso de Helio Castroneves a IMSA, aunque el brasileño sí estará en Indianapolis, en su icónico auto No. 3. En su momento, el ex Fórmula 1 podría haber recibido permiso para correr con otro equipo, dada la relación que Penske tiene con Acura (filial de Honda) y Chevrolet (su motorista de IndyCar), pero esto no ocurrió.

“Nuestra posición oficial es que nuestros pilotos típicamente no compiten contra nosotros en otras series”, indicó una declaración del equipo.

La semana pasada, Montoya anunció su incorporación a Le Mans con United Autosports, en la clase LMP2 del FIA WEC, su primera oportunidad de obtener la «Triple Corona» del deporte motor.