Mazda busca elevar 50 % la eficiencia de sus motores de gasolina para 2020, de acuerdo al jefe europeo de desarrollo e investigación, Kenichiro Saruwatari. La eficiencia actual de sus motores de gasolina es un 40 % competitiva, pero se espera llegar al 60 % en el próximo lustro. Buscan lograrlo mediante el desarrollo de tecnología de carga homogénea y encendido por compresión, HCCI, en el cual la mezcla se enciende por compresión en lugar de por chispa, como con el diésel.

Esto implicará incrementar la relación de compresión de aproximadamente 14.0:1 a 18.0:1 y alcanzar un control muy preciso del proceso de combustión para evitar el cascabeleo. El objetivo es combinar las emisiones limpias de un motor de gasolina con la eficiencia del diésel.

Como parte de su programa de eficiencia, Skyactiv, Mazda también investiga reducir la pérdida de calor a través del escape que normalmente pierde cerca del 30 % de la energía del combustible. “Estamos considerando muchas soluciones, pero aún no nos decidimos por una”, dijo Saruwatari. La empresa ha perseguido la eficiencia desde el desarrollo del Mazda 6 de 2002, el cual fue “la primera generación del plan de trabajo”, comentó Saruwatari, quien también dijo que la próxima CX-5 híbrida será la primera de la séptima generación.

“La dirección principal de Syactiv no ha cambiado”, añadió, “aunque a veces encontremos tecnologías y materiales nuevos que producen un cambio radical”.

Recientemente Mazda anunció una sociedad con Toyota (ver FASTmag #42), pero ha dicho que a la larga sus autos de gasolina podrían igualar la eficiencia del ciclo competo del EV. Esto podría traducirse en emisiones de C02 del ciclo total de unos 80 g/km para un modelo “promedio”, equipado con un motor Skyactiv Gen 2.

La tercera generación de motores Skyactiv podría llegar incluso más lejos. Anteriormente Mazda habló de emisiones tan bajas como 50 g/km, aunque no le ha puesto fecha.