FOTO: Jared C. Tilton/Getty Images for NASCAR Media

Jimmie Johnson volvió a demostrar que los pilotos de carreras, sea cual sea la modalidad de coches, son atletas de alto rendimiento.

El heptacampeón de la Copa NASCAR participó este lunes en el Maratón de Boston, uno de los más importantes del mundo, el cual completó en tres horas, nueve minutos y siete segundos.

«Qué experiencia increíble… las historias que la gente me ha dicho que han estado en esto antes ni siquiera se acercan a lo que es en la vida real», expresó a la cadena local de CBS. «La primera mitad fue tan fácil, y escuché tanto sobre ello».

Johnson, ganador de 84 carreras de Copa con Hendrick Motorsports, comenzó su preparación desde el arranque del año, misma que incluyó una carrera durante la «Semana de la Velocidad» en Daytona y un régimen de alimentación más exigente que la que ejerce en las competencias.

Pese al calendario apretado de competencias, ya que la Copa no ha tenido fines de semana de descanso desde el arranque de temporada, el californiano logró organizar su agenda de actividades para el maratón, en la que se ubicó en el lugar 4,155 general y en el 641 en su división, entre los 40 y 44 años.

«Quería correrla, así que salí con un ritmo cardíaco y tiempo en mente. Quedé un poco cerca (de cronometrar menos de tres hporas), pero aún hacerlo así de bien, estar en las tres horas bajas, estoy contento con ello», afirmó.