fueradelaire

Por Fernando Tornello

Arranca la F1 de 2016 y, como siempre, se renuevan las esperanzas por volver a ver un campeonato con varios candidatos. Eso parece hoy más un deseo que la posibilidad real de que ocurra. Sólo pido que no se repita que un equipo gane todas las carreras excepto tres, como ocurrió en 2014 y 2015.
Para tratar de adivinar lo que vendrá hay que darse un baño de realidad y decir que Mercedes parte otra vez como el favorito. Los alemanes tienen un motor extraordinario y un chasis muy competitivo, sólo presentaron pocos puntos débiles, como frenos y embrague, pero fueron mejorando esos aspectos en la última temporada. Sólo una postura más combativa de Nico Rosberg hará que la batalla interna se caliente y nos muestre a Hamilton extremando sus recursos y talento, para hacer carreras más entretenidas. Nico lo mostró en el final de 2015… cuando Lewis ya había ganado el título.
El gran desafiante de Mercedes será Ferrari. Todavía es una incógnita el rendimiento que alcanzarán los autos rojos pero Vettel y Raikkonen contarán con más posibilidades que en 2015. Si el motor fue realmente mejorado y Ferrari sube varios escalones, Vettel podrá disputarle el título a los campeones actuales. Es la gran esperanza de los tifosi, que nunca dejan de soñar en el inicio de una temporada. A favor del equipo italiano se cuenta que mantuvieron, aún en condiciones adversas, la moral muy alta, así como la capacidad y eficiencia en el trabajo, por ejemplo en las paradas en los fosos. Deben corregir algunas fallas estratégicas en calificación, que causaron serios problemas en el pasado.
Entre los equipos que deberían mostrar un crecimiento interesante se encuentra Williams. La escuadra inglesa tuvo un auto muy veloz en 2015, aunque falló notoriamente en circuitos lentos y en su gestión de carrera y detenciones. El modelo FW38 fue concebido con soluciones para mejorar en pistas lentas, tratando de no perder velocidad en las rápidas. Siguen con el motor Mercedes, que no les provocó problemas y les dio velocidad y confiabilidad. Bottas y Massa tendrán un coche más eficiente y podrán demostrar su talento. Uno está en etapa de crecimiento, el otro en los años finales de su carrera.
Otro que va a mejorar es McLaren. Claro, peor que en 2015 no puede estar, fue el peor año en la historia de la marca. Hasta qué nivel llegará depende de la evolución de su motor Honda. Los japoneses aseguran que será mucho mejor que el anterior. A su favor, la escuadra de Ron Dennis cuenta con dos pilotos excelentes y personal que sabe ser competitivo. Entre Alonso, Button, los ingenieros y los motoristas tratarán de demostrar que 2015 será sólo un recuerdo malo. Lo que hagan va a sorprender, por bueno o por malo.
La gran pregunta que flota en el ambiente de la F1 es acerca de cómo retornará Renault a la categoría. La marca francesa compró Lotus, firmó a Jolyon Palmer y a Kevin Magnussen como pilotos, dejando sin lugar a Pastor Maldonado ante supuestas faltas de pago de su petrolera venezolana auspiciante. En el seno del equipo ya aclararon que se tomarán tres años para pretender ganar el título. Han incorporado como consultor en tema motores a Mario Illien, para tratar de mejorar la potencia de su tren motriz, punto débil del 2015. El destino está en sus manos.
Red Bull sueña con volver a sus años de gloria (2010-2013), pero sabe que su motor Tag –Renault con otro nombre– no le permitirá, todavía, cumplir con ese deseo. El director, Christian Horner, aseguró que Toro Rosso podría batir a Red Bull en la primera parte del año. El equipo mantiene a Ricciardo y Kvyat como pilotos y su chasis RB12 debería ser tan competitivo como el anterior. El talento de los ingenieros encabezados por Newey nunca estuvo en discusión.
Muchos tienen la mirada puesta en Force India. El equipo tiene puntos a favor y en contra. En el lado positivo están sus pilotos, ‘Checo’ Pérez y Nico Hulkenberg, dos talentos que sumaron gran cantidad de puntos en 2015. También los motores Mercedes y un grupo de ingenieros y mecánicos que se sobrepusieron a las debilidades del equipo, conformadas por los problemas económicos y legales de sus dueños. Afortunadamente, eso no hizo mella y Force India completó su mejor año en F1. En 2016 comenzaron mejor, por lo menos pudieron hacer los ensayos de pretemporada.
Toro Rosso y Sauber dependerán del dinero que consigan para evolucionar durante el año. Ambos estarán impulsados por motores Ferrari, lo que les asegura buena potencia, aunque en el caso del equipo italiano sean unidades de 2015. Nasr y Ericsson se mantienen en Sauber, mientras la dupla juvenil que se consagró el año pasado, Verstappen y Sainz, seguirá en Toro Rosso.
Manor debería mejorar claramente, ha incorporado motores Mercedes, a varios ingenieros y personal con trayectoria en equipos grandes, como Pat Fry, Nicolás Tombazis y Dave Ryan, y se cree que funcionará como equipo B de los campeones del mundo. Sus pilotos serán Pascal Wehrlein, campeón del DTM, y Rio Haryanto, primer piloto de Indonesia en F1.
Para cerrar, la categoría tendrá un equipo nuevo en esta temporada, el Haas Racing, con base en Estados Unidos, liderado por Gene Haas, con motores Ferrari y Romain Grosjean y Esteban Gutiérrez como pilotos. Esperan posicionarse arriba de Manor y en batalla con Sauber y Toro Rosso. El tiempo dará su veredicto.
En lo personal sólo espero que no se repita lo de Australia 2015, cuando sólo 15 pilotos arrancaron el primer GP del año, algunos ausentes con problemas físicos, otros con inconvenientes monetarios y otros con una debacle técnica provocada por el absurdo reglamento de motores, que espero sea corregido para 2017. Para eso todavía falta esta campaña, que puede ser la primera con 21 fechas. A vivirla intensamente.