Por Miguel Hernandez.
Al momento de elegir un auto normalmente tenemos que barajar nuestras opciones dependiendo de nuestra necesidad principal, es decir, si queremos un auto deportivo sacrificará seguridad y consumo de combustible, si queremos un auto que sea seguro, sacrificará su apariencia, y si queremos un auto que sea eficiente con el combustible normalmente sacrificará mucho más, espacio, comodidad, velocidad, etc.

Esto no sucederá más con el anuncio que acaba de hacer BMW y la introducción de su Serie 4 Coupé, un vehículo tecnológicamente tan avanzado que no sacrifica ningún aspecto ya que conjuga la poderosa apariencia de un deportivo con las prestaciones de seguridad, comodidad, conducción y eficiencia, que alcanzan un nivel imposible de encontrar en otro auto.

Con la premisa de que “de la vista nace el amor”, el BMW Serie 4 Coupé inicia con un diseño estético agresivo e imponente y, al ser la evolución de su afamada serie 3 coupé, el vehículo es más ancho y más largo, los conductos de aire en las salpicaderas le dan una ventaja aerodinámica más, mientras acentúan su diseño. Cuenta con el centro de gravedad más bajo de toda la gama que produce la marca, lo que le da una estabilidad incomparable y su dirección asistida eléctricamente le da un control excepcional.

Las motorizaciones de cuatro o seis cilindros en conjunto con su transmisión automática de ocho velocidades ofrecen un desempeño inmejorable al brindar potencia con un bajo consumo de combustible, ofreciendo un rendimiento de 15.63 km/lt y una velocidad máxima de 250 km/hr gobernada electrónicamente, además de un control de emisiones muy por encima de los estándares mundiales.

Sin duda solo será cuestión de tiempo para que esta nueva opción en el mercado de los coupés forje su propia historia.