Los turbodiesel se imponen a los híbridos en el debut de estos últimos; Porsche bate a Ferrari en GT. PETER MEADOW reporta.

Toyota no llegó a las 6 Horas de Spa –un choque en Paul Ricard dañó su único chasis– pero Audi debutó su R18 e-tron quattro híbrido para correr contra el R18 ultra turbodiésel y la batalla entre los dos ejemplares de cada modelo fue tan feroz como si fueran marcas rivales.

La calificación puso adelante al híbrido seguido por un TDi, otro e-tron y otro TD1, y luego vinieron los prototipos LMP1 de gasolina con Nick Heidfeld al frente en su Lola-Toyota, 1.5 segundos más lento que el Audi menos veloz.

La carrera inició con lluvia y en la pista mojada los e-tron con su tracción total quattro parecían tener la ventaja, pero tomaban más en calentar los neumáticos y los pilotos de los TDi aprovecharon ese detalle para emparejarlos.

Kristensen en el #2 punteaba seguido por el #1 de Lotterer, pero justo detrás venían los TDi de Bonanomi #3 y Gené #4, estos dos últimos pilotos debutantes con la firma de los cuatro aros.

Cuando pararon Gené puso llantas de seco y empezó a alcanzar a los demás y cuando entregó el auto a Duval éste pasó al líder Treluyer en la pista que se secaba, ayudado porque el otro híbrido se había retrasado tras cambiar la trompa. Luego vinieron dos períodos de auto de seguridad por choques y cuando Dumas tomó el #4 para cerrar la competencia, su ventaja ya era de casi un minuto sobre Fassler en el #1 y así se mantuvo hasta el final.

El #2 ya no fue problema pues también perdió tiempo con el insignia y luego fue penalizado por exceso de velocidad en los fosos tras un pinchazo y quedó cuarto, detrás del otro TDI que nunca pudo mantener el ritmo de los ganadores, quienes completaron 160 vueltas al circuito de 7,000 metros.

En la LMP2 el mexicano Ricardo González quedó séptimo –-3° en el WEC–- a cuatro giros de los ganadores Dolan/Hancock en un Zytek Nissan como el suyo. En la GTE Pro el Porsche 911 de Lieb y Lietz se impuso a los Ferrari 458 mientras que Adrián Fernández quedó en último general (40°) tras abandonar al romper la caja cuando apenas llevaban 11 giros.